La Radio No. 1
Uno de los mayores placeres que un simple esclavo del capitalismo puede disfrutar es el de el sábado por la mañana, despertar, tomar una taza de cereal con leche y banana, sentarse en un sillón y escuchar una selección de música favorita. La que ese día nos inspire, puede ser algo de rock melancólico para un amanecer lluvioso o algo