Para hacer frente a las bajas temperaturas del invierno es fundamental contar con un buen sistema de calefacción. Mantener la calefacción encendida se hace indispensable, sin embargo, los hielos y las bajas temperaturas pueden acarrear problemas técnicos en los equipos. Para evitar esto, es importante usar de forma eficiente el sistema de calefacción, y para ello, nada como seguir los consejos que nos dejan desde Daikin.
Mantener los equipos conectados
En aquellas casas poco habitadas o que son segunda residencias, es recomendable que los equipos estén conectados para que la protección antihielo funcionen. En el caso de calderas, la llave de gas abierta.
Retirar la nieve y el hielo
Cuando ocurren fuertes nevadas, si nuestro sistema está parado, antes de ponerlo en marcha hay que retirar toda la nieve y el hielo que puedan tener. En el caso de calderas, asegurarnos de que las chimeneas no presentan obstrucciones que puedan provocar bloqueos en la máquina e incluso generación de monóxido de carbono.
Reducir temperatura antes que apagar
En vez de apagar el sistema en ciertos momentos, es recomendable bajar un poco la temperatura para mantener un régimen continuo. De esta forma, cuando subamos la temperatura, costará mucho menos llegar a ella.
No aumentar la temperatura si hace más frío
Un error muy común es pensar que conforme más frío haga en el exterior, más tendré que subir la temperatura en el interior. Esto no es necesario, ya que si programamos una temperatura interior de 20ºC, por ejemplo, el equipo se asegurará de mantener dicha temperatura, independientemente de los grados que haya fuera, aunque para ello, deba incrementar su potencia.
Confía en los expertos
Ellos son quienes mejor nos pueden ayudar para que cuando llegue el momento de afrontar los rigores del invierno, tengamos un sistema seguro, fiable y eficiente.
Elegir la tarifa adecuada
En muchas ocasiones no somos conscientes de que existen tarifas en el mercado que son más baratas y se adaptan mejor a nuestras necesidades que la que tenemos contratada. Por ello, es importante revisar que nuestra tarifa es la adecuada y no estamos pagando de más por algo que realmente no necesitamos.
Elige una temperatura entre 19 y 21ºC para tu termostato
Lo ideal según los datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) es regular el termostato entre los 19ºC y los 21ºC durante el día. Es importante tener en cuenta que por cada grado que se incrementa la temperatura de la vivienda, el consumo energético aumenta en un 7%.
Buen aislamiento en paredes y ventanas
Es fundamental contar con un buen aislamiento en puertas y ventanas, gracias a él se puede reducir el consumo de calefacción hasta un 15%.
Utilizar equipos de máxima eficiencia
A la hora de adquirir un nuevo equipo es importante tener en cuenta su calificación energética. Elegir equipos A+++ puede suponer una reducción de hasta un 30% en el consumo de energía. Los equipos de bomba de calor ofrecen estas ventajas y la posibilidad de combinarlos con otros sistemas para logar un confort y un bienestar total en el hogar.
No tapar los radiadores
Es muy común poner ropa o mantas encima de los radiadores para que se calienten, pero lo cierto es que lo único que conseguimos es tapar el radiador, de manera que el calor se concentra bajo ese elemento e impide que se distribuya eficientemente por toda la estancia.