Lo que parecía una moda pasajera cuando comenzó a surgir hace algunos años, se está asentando, tanto que ya forma parte de las tendencias fijas en cada catálogo de decoración y se renueva cada temporada, aportando personalidad y autenticidad a cada espacio de nuestros hogares.
Según una de las acepciones del diccionario, la palabra vintage, la protagonista indiscutible del post de hoy, no es más que “el término empleado para referirse a objetos o accesorios con cierta edad, que no pueden aún catalogarse como antigüedades, y que, como los buenos vinos, se considera que han mejorado o se han revalorizado con el paso del tiempo”.
Es decir, recurrir a muebles, adornos o complementos para el hogar de otras épocas que, aunque no estén de moda, siguen siendo bellos en sí mismos. No necesariamente tienen que ser antigüedades, pueden ser objetos resignificados, aunque los que más carácter aportan son los elementos antiguos.

Aunque la mayoría suelen implicar un gran desembolso debido a su gran demanda, lo cierto es que también podemos hacernos con una decoración para el hogar vintage si tenemos piezas que pertenezcan al legado familiar.
Además de ser más económicos, están ligados a un recuerdo que te conecta directamente con la familia y le hace ser incluso más especial y más valorado sentimentalmente.
¿Qué características tiene la decoración vintage que veremos esta temporada?
A pesar de ser, como decíamos al inicio, una tendencia que lleva años impuesta en nuestros hogares, lo cierto es que cada año tiene aspectos que destacan sobre el resto y les hace ser más demandados por los amantes de esta forma de decoración.
Muchas ideas sobresalen a diario de las redes sociales. Pinterest o Instagram son las plataformas perfectas para inspirarse y saber cómo combinar a la perfección objetos modernos o ambientes actualizados con piezas con años de antigüedad a sus espaldas.
Desde habitissimo nos envían un repaso por todo lo que se cuenta sobre lo vintage a día de hoy y queremos ofrecerte un amplio decálogo para que puedas incluir la decoración más de moda, la atemporal, en tu casa. ¿Empezamos?
Rose Gold
Para trasladarnos a otras épocas sin movernos del salón es lo que pretende el primero de los rasgos que caracteriza a la tendencia vintage. El tono de elementos decorativos “rose gold” está más de moda que nunca.

Objetos con un toque cobrizo pero con tonos rosados los podemos encontrar en gran variedad de establecimientos de decoración. Desde estanterías, pasando por candelabros, mesas o elementos decorativos como griferías o espejos. Combinan a la perfección con la paleta de colores neutros como son el blanco, negro, gris o visón.
Baúles de antaño
Otros elementos imprescindibles en un hogar con toques antiguos es la reutilización de piezas de almacenaje, como son los baúles, para darles un segundo uso y tenerlos como mesas auxiliares, cómodas, estanterías o, incluso, para seguir dándoles el uso que tuvieron en su momento.
El carácter que aporta una pieza de este tipo es esencial para crear una estancia personal y muy arraigada con la historia que ha tenido ese baúl en sus primeros usos. Para lanzarte a la piscina de la tendencia vintage, no puede faltar en tu casa un baúl como el que te enseñamos a continuación.
Vajillas retro
Otro rasgo característico que no puede faltar en tu casa para subirse a la ola de la tendencia de moda, el vintage, es tener, al menos, un juego de vajilla retro. Tanto si es heredado de tu madre o abuela, como si lo adquirimos en una tienda de segunda mano, el carácter será increíble en cada comida que hagas con amigos.
Cada vez más adeptos son los que alaban platos, tazas o cubiertos que tienen estilo propio y combinan con otras piezas de colecciones diferentes a la perfección. Los más demandados son los enlozados o porcelana.

Escaleras antiguas
Otro indispensable en toda decoración vintage en el elemento decorativo más versátil que encontramos actualmente, la escalera de madera de antaño.
Y te preguntarás, ¿por qué es versátil? A priori, pensaremos que esa escalera, que usaban nuestros antepasados para subirse a sitios altos, no tiene más utilidad que dejarla guardada en un trastero. ¡Pero no!

Ahora, el ‘must have’ para darle un nuevo uso a este instrumento es usarlo como estantería. Pero no una estantería cualquiera, no. En la red hemos visto muchas ideas, a cuál más increíble.
Desde dejarla recostada en un lateral para servirnos de perchero para ropa o toallas de baño, como para ser el respaldo de sillas, o incluso la vemos colgada del techo de la cocina para servirnos de alacena cuando necesitamos más espacio extra.

Marcos desgastados
El último elemento que vamos a destacar en este repaso por la moda más retro lo encontramos en los marcos de cuadros o espejos desgastados.
Aunque su utilidad primera es soportar una bonita fotografía, cuadro o un espejo para hacer uso en nuestros momentos de acicalamiento, lo cierto es que los marcos han pasado a tener otra nueva función.
¡Sí, sí! Como lo oyes. La función es no tener función aparente. La tendencia es elegir un marco antiguo, preferiblemente que tenga la pintura parcialmente caída y, o bien ponerle uno de los elementos anteriores dentro, o bien dejarlo solo recostado en un mueble como elemento decorativo.
Añádele un par de plantas a su alrededor y verás que espacio tan único consigues con elementos tan básicos como éstos.
