Se llama Flux Chair, y fue una de las estrellas de la feria de Frankfurt celebrada en en febrero. Y no es para menos, porque se trata de una silla con un estilo de lo más original.
Está hecha en polipropileno, y es un diseño de los diseñadores Douwe Jacobs y Schouten Tom, que se despliega y se convierte en una silla en tan solo 10 segundos. Visto y no visto. De repente la tienes plegada y en pocos segundos, tienes una silla.
Es muy ligera, otra de sus ventajas, pero soporta bastante peso. Por cierto, que al plegarla, tiene forma de sobre, y se queda con un asa para que sea más cómodo llevarla de un sitio a otro.
Además, está en ocho colores distintos, naranja brillante, rojo clásico, lima, limón y azul hielo. La puedes conseguir en Y Living.
Vía| Casa sugar