Es sabido que en los dormitorios infantiles debe haber siempre facilidad para organizar el desorden, un área de juego y de estudio separada de la zona de descanso y sobre todo…¡mucha funcionalidad! Por eso aprovechar cada rincón es imprescindible y por este motivo hoy quiero hablarte para que aprendas a tener unas paredes prácticas para la habitación de tus hijos y que además a ellos les encante.
Una idea para tener unas paredes prácticas en la habitación de los niños es aprovechar todo lo que las paredes nos ofrecen para ampliar la zona de juego a las paredes. ¿Qué te parece? Me refiero por ejemplo a dejar que los niños pinten la pared…¡pero ojo! No encima de la pared, es decir habría que preparar la pared para que ellos puedan liberar toda su imaginación, y hoy en día existen diferentes opciones.

Lo primero que puedes hacer para que sean las paredes prácticas como zona de juegos ampliada es pintar una pared o una zona de la pared con pintura de pizarra y cuando esté seca… ¡tus hijos se lo pasarán en grande porque podrán pintar y dibujar con tizas! Y eso a los niños… ¡les encanta!
Pero si no quieres tener la pared pintada con pintura de pizarra puedes comprar una pequeña pizarra enmarcada y colgarla en la pared a una altura ideal para que ellos puedan pintar en ella, sería estupendo ¿verdad?
Pero si ninguna de las dos opciones comentadas te convence pero te gustaría que tus hijos pintaran en la pared y luego pudiera quedar igual que al principio…puedes optar por colocar murales blancos de papel (los venden en las papelerías en rollos grandes), los puedes colocar en la pared adherido con celo por ejemplo y que tus hijos pinten con ceras, pinturas, rotuladores…¡lo que quieran! Y una vez que se ha acabado la obra de arte sólo habrá que retirarla.
¿Cuál de estas tres opciones de paredes prácticas te gusta más?