La vitrofusión es una técnica muy bonita, caracterizada por la unión de dos o más laminas de vidrio, de igual o diferente grosor. Esto de logra mediante la exposición a altas temperaturas, en hornos especiales, logrando resultados más resistentes.
Una vez listas las piezas solo se le deben dar color y forma, obteniendo así resultados únicos e irrepetibles.
El color se le otorga a estas piezas mediante el uso de esmaltes, pigmentos y óxidos, y las formas son logradas a través de moldes especiales, destinados a esta técnica.
Como puedes observar en cada una de las imágenes, es posible realizar desde vajilla, bandejas y fuentes, hasta todo tipo de adorno; ceniceros, apoya vasos, jaboneras, floreros, todo es posible con la vitrofusión.
Hay que recordar que más allá de su belleza, se trata de piezas muy delicadas, por lo que su cuidado es muy importante.