Una investigación ha demostrado que el 60 por ciento de las viviendas de España no tienen aislamiento térmico o el que tienen no es el adecuado. Esto genera varios problemas, entre ellos el de la humedad.
La cifra antes mencionada se traduce en unas 15 millones de personas que se encuentran susceptibles de padecer humedad. Cada vez son más las edificaciones que deben ser reparadas por sufrir humedad estructural.
Año a año las cifras de las obras que sirven para reparar los problemas de las viviendas con humedad son mayores. Se estima que durante este año más de 22 mil hogares fueron afectados. Recién en el año 1979 se firma la primera norma básica moderna en la que se menciona la necesidad de agregar un aislante térmico como un elemento constructivo. En la actualidad el 60 por ciento de las viviendas que existen son anteriores a ese año.
Los niveles exigidos no garantizan la ausencia total de la humedad y condensaciones. En el año 1999 se creó la Ley de Ordenación de la Edificación en la que se agrega una normativa técnica. Los expertos aseguran que si la edificación está bien realizada los aislamientos no deberían presentar deficiencias, de hecho, este problema no es común a todas.
Para poder detectar la presencia de la humedad existen algunas pistas, por ejemplo, la aparición de las manchas negras producidas por los hongos y por el moho, mal humor que genera la humedad en la casa y en la ropa, hinchazón en los muebles de madera o parque, vaho continuo en los azulejos, cristales, ventanas y paredes.
Existen diferentes tratamientos gracias a los cuales se puede erradicar la humedad, uno de ellos es por capilaridad, el mismo consiste en crear una barrera en los muros usando un sistema de inyecciones que obstruya los poros por donde asciende el agua. El material que se usa es resina siliconada específica para cada soporte.
