Una buhardilla puede abarcar toda la planta superior de un edificio o solo una zona del mismo, sea como sea estos lugares en muchos edificios suelen estar mal empleados o quizás un poco abandonados debido al dificultoso acceso a los mismo.
En las casas antiguas, estos lugares, suelen poseer una puerta trampa y una escalera plegable para acceder al mismo. Sea como sea tu buhardilla no la desaproveches, si posees un espacio similar considera la posibilidad de un acceso más cómodo y redecorarlo y arreglarlo a tu gusto.
Las buhardillas fueron pensadas como cubiertas para los edificios, por ello no poseen un buen acondicionamiento tanto a nivel térmico como de humedad e iluminación.
Antes de utilizar estos lugares, para habitar en ellos, deberemos prepararlos y acondicionarlos para aislarlos del frío y del calor.
Las condiciones de luz son muy importantes, dependiendo del uso que le demos a la misma tendremos que considerar un sistema de iluminación adecuado para el uso que le daremos.
El inconveniente con el que nos encontramos, de primera hora, son los bajos techos y la inclinación de los mismos; esto nos deja espacios y zonas muertas de difícil uso.
¿Qué uso daremos a nuestra buhardilla? ¿Quizás un dormitorio para invitados? ¿Una sala de juegos? ¿Un salón de música? Para acondicionar el lugar deberemos definir qué es lo que queremos realizar en el mismo.
Si disponemos de pocos metros cuadrados, la buhardilla puede servirnos para suplir esa falta de espacio, por ejemplo para instalar el dormitorio de los más pequeños, para brindar privacidad a nuestros adolescentes o quizás para una oficina.
No podemos olvidar arreglar la instalación eléctrica así tendremos focos de luz donde creamos oportunos.
Una sala de lectura es una gran idea, colocando un sofá, librerías, una lámpara y una bonita mesa podemos pasar las tardes leyendo junto a una buenta taza de café.
Los colores claros darán espacio a la buhardilla; colocar espejos en alguna pared, ubicar pavimentos blancos… con esto parecerá que ganemos en amplitud e iluminación.
Podemos elegir muebles de dimensiones reducidas, ya que los techos son bajos. Evitar las lámparas colgantes e intercambiarlas por luces directas centradas en las áreas de mayor necesidad, también dará amplitud y profundidad a la sala.