En las mañanas siento la diferencia entre el verano y el invierno de una forma radical. La verdad, me resulta mucho más cómodo despertarme a las siete de la mañana del verano que a la misma hora en invierno. Puede ser solo un efecto en la psicosis pero siento que he descansado más cuando me acuesto a dormir en la noche y me levando o en el día, no cuando me duermo en la noche y me despierto en la noche, igualmente.
La mañana en invierno es noche y para acompañarnos con una buena iluminación, sin contar con el sol, es importante tener una buena lámpara con nosotros. Colgantes, de pared, de mesa y de piso las lámparas en vidrio siempre son bien recibidas. Sus pantallas usualmente reflejan mucho más la luz y su aspecto delicado las provee de un halo de modernidad y estilo. Indispensable que las bombillas sean ahorradoras de energía, tecnología LED, y que su poder de iluminación se pueda graduar según las necesidades del ambiente. Algunas veces contamos con la suerte de tener algo de claridad a las 8:00 a-m.
La lámpara MANHATTAN, diseñada por GUNNEL SVENSSON en 1997, en vidrio transparente se caracteriza por tener una banda horizontal, en uno de sus modelos, o estriado verticalmente, en otro. Algunos modelos vienen también en vidrio polarizado y de color. Los elegantes detalles en acero inoxidable, cromo y aluminio la convierten en una exclusiva pieza de diseño contemporáneo.
Se pueden encontrar en modelos de lámpara colgante, de mesa y de pie. La colgante es producida en 160, 200, 230, 290, 350 y 500 mm. la de mesa se encuentra de 80 y 160 mm.
Mayor información en la página Web www.bsweden.com