Desde pequeña recuerdo como, al llegar el invierno todas las calles se llenaban de madera para utilizar en el fuego o en las estufas y como poco a poco se iban pasando a las casas para luego ser utilizadas. Como vivía en un pueblo esas maderas pertenecían en su mayoría a cepas arrancadas de las viñas que ya no servían, pero esto es mucho mejor.
Primero, los trocos están perfectamente cortados para poder cogerlos con más comodidad, sin mancharte y sin necesidad de hacerte ningún arañazo. Además están aplilados tras la estufa para poder cogerlos cuando hagan falta sin tener que salir al patio, jardín, o cuál quiera que sea el lugar en el que están guardados.
El modelo ha sido diseñado por el arquitecto Anders Norgaard para la empresa Wittus y además de ser más bonito que las anteriores chimeneas tradicionales, tienen una función estética importante, dando un toque rústico y hogareño a la casa. La serie se llama Cubic y contiene siete modelos diferentes, ya sean para pared o para instalar en el suelo.
Además incorporan un sistema de «lavado de aire», algo así como un sistema de auto-limpieza de la puerta de cristal, que la mantiene sin hollín para poder ver el interior y saber en todo momento como va el fuego.
Más información: Wittus
Vía: Trendir