Los viejos disquetes (diskettes o discos de 3/2, como los llamaba una amiga) sirven todavía para algo más que para ocupar hueco en los cajones. Algunos nostalgicos, como yo, todavía nos resistimos a que jamás se volverán a utilizar y los guardamos como un tesoro con información que algún día nos valdrá. No nos engañemos.
De todas formas, con ideas como esta puedo darles otro uso. Me requirirá paciencia, eso sí, pero podrán ser útiles para algo. Se trata de una mesita para el ordenador portátil creada con muchos disquetes pegados unos con otros en ángulos de 45 º ¿original verdad?
Se me ocurre que el diseño se podría completar de otra forma. Podemos cortar una tabla fina, de marquetería, y ponerla encima como tablero, incluso dejar espacio en las laterales para utilizar los huecos como bote para lápices y objetos.
Vía: The design blog