Como ocurre con todo (o con casi todo), para llevar ideas a la práctica en decoración es necesario conocer un poco de teoría. Por ello, hoy hablaremos acerca de las cortinas para salones y de las diferentes opciones que puedes encontrar en el mercado.
Las cortinas en tonos oscuros son ideales para los salones que amplios y con grandes ventanales o balcones.
Las cortinas de colores suaves, incluyendo las populares cortinas blancas, se adaptan a la perfección a cualquier tipo de salón, aunque si tenemos un sofá en tonos azules o una pared por ejemplo de color rojo, quizás podemos optar por elegir un color similar, y algo más claro, para que las cortinas combinen.
La cortinas de visillo son, por lo general, las más comunes de ver en los hogares, y en los salones, ya que el visillo es un tejido que rechaza el calor y que permite que que ingrese el aire del exterior incluso cuando están cerradas.
Las cortinas de seda son ideales para un salón grande, que además tenga una decoración estilo “vintage” o tradicional y con mucho estilo.
Las cortinas de algodón son muy frescas en verano, permitiendo que el aire entre aunque estén cerradas. Pueden conseguirse en una gran variedad de colores.
Las cortinas de lino son parecidas a las de algodón pero son más propensas a arrugarse, sobre todo en ambientes donde hay mucha humedad.