Si a tu cocina le faltan algunos metros cuadrados te interesa leer este artículo, porque hoy queremos hablarte de las diferentes soluciones que tienes a tu alcance para aprovechar bien el espacio en una cocina pequeña. Sigue leyendo y verás que existen soluciones geniales que te ayudarán a hacer de tu cocina un espacio funcional y muy práctico.
Uno de los males de los que adolecen la mayoría de las casas de la gente corriente como tú y como yo es la falta de espacio. Quien no ha pensado alguna vez en las miles de cosas que cambiaría en cuanto a la decoración si tuviese una casa más grande. Si pudiese disponer en la cocina de unos cuantos metros más… Pues bien, el espacio es importante pero no lo es todo. Hoy te contamos cómo puedes aprovechar el espacio en una cocina pequeña.
Por muy pequeña que pueda parecerte tu cocina, después de leer lo que voy a contarte a continuación verás como encuentras la solución para amueblarla con acierto y así poder aprovechar de la mejor manera cada hueco. El resultado será una cocina práctica y decorativa, perfecta para tus necesidades.
Ideas para multiplicar el espacio en una cocina pequeña
La cocina es una estancia en la que el espacio adquiere una importante dimensión. Necesitamos espacios para guardar, para almacenar menaje, alimentos, accesorios, etc., pero también necesitamos tener sitio suficiente para trabajar, para movernos con comodidad por la cocina.
El caso es que es fundamental no malgastar ni un solo centímetro si queremos disponer de una cocina funcional y decorativa, en la que nos encontremos a gusto. Lo primero que debemos pensar es en plantear una distribución correcta de todos los elementos imprescindibles si queremos ganar espacio en una cocina pequeña.
¿Por qué no la conviertes en una cocina abierta?
Puede que nunca hayas pensado en tener una cocina abierta al salón (lo que se solía llamar una cocina americana), pero si la que tienes ahora es demasiado pequeña, puede que te interese tirar un tabique, abrir el espacio y disfrutar de un ambiente conjunto compartido por el salón y la cocina (eso sí, separados; cada uno son su propia identidad).
Si esta solución es posible en tu caso y te decides por ella, es importante que pienses en materiales y acabados que estén en equilibrio con el tipo de muebles que decora el salón. Busca materiales y una paleta de colores que armonicen con el resto de la decoración.
Una ventaja que tienen este tipo de cocinas abiertas es que la luz se multiplica, y la sensación de amplitud es mucho mayor. El espacio aparece más diáfano, menos compartimentalizado, por lo que parece aumentar como por arte de magia. Es cierto que es una sensación visual, pero tiene su importancia.
Mejor con muebles de colores claros
Las cocinas en las que no sobra el espacio resultan favorecidas por muebles ligeros, de colores claros y luminosos que no resulten pesados. Puede que te vuelvan loco las cocinas con muebles rojo pasión o las encimeras negras, sin embargo, los colores fuertes y oscuros reducen visualmente el espacio en una cocina pequeña.
Apuesta mejor por los muebles blancos, gris claro, crema o cualquier otro color que resulte más liviano y luminoso. También es mejor elegir muebles que no sean muy recargados, sin molduras ni demasiados detalles. Mejor opta por puertas lisas y sin tiradores.
Piensa en lo fundamental
Cuando vayas a diseñar tu cocina, lo mejor que puedes hacer es ver qué elementos te resultan imprescindibles. Esos a los que no quieres renunciar bajo ningún concepto (para mí, uno de estos elementos sería el lavaplatos, fundamental en cualquier cocina de hoy día. Además, existen modelos de tamaño reducido que caben casi en cualquier rincón).
Tendrás que pensar si necesitas mucho espacio para guardar, un rincón de despensa y qué tipo de electrodomésticos te harán falta. Puedes optar por hornos multifunción (que hagan las veces también de microondas) o por lavadoras-secadoras (que vienen de perlas cuando no tenemos espacio para tender la colada).
Estantes abiertos para aligerar el espacio
Los muebles dotados de estantes abiertos, o las propias estanterías de pared sin puertas, son perfectas para cocinas pequeñas, ya que resultan más ligeras desde un punto de vista visual. El espacio no parece tan lleno, tan abigarrado. Eso sí, no todo son ventajas, también tienen algún inconveniente. El orden ha de ser escrupuloso, si no quieres que el efecto decorativo sea nefasto. No hay nada peor que una estantería a la vista llena de trastos y cachivaches desordenados.
Busca soluciones de pared, como ganchos para colgar cosas en la zona del salpicadero de la pared. Puedes instalar una barra de la que colgar utensilios de cocina o pequeños contenedores para almacenar cosas. Una idea que, además, resulta decorativa.
Busca elementos de menor tamaño
Aunque los muebles de cocina y los electrodomésticos suelen tener unas medidas estándar, los fabricantes conocen el problema que muchas personas tienen a la hora de aprovechar el espacio de una cocina pequeña, por lo que se han desarrollado elementos más pequeños.
Hay electrodomésticos más estrechos de lo normal, vitrocerámicas con dos fuegos en lugar de tres o cuatro, campanas extractoras más pequeñas que, además, se esconden bajo el mueble, etc. Busca este tipo de elementos y lograrás que a tu cocina pequeña no le falte detalle. ¡Seguro!