La cocina es una de las estancias donde pasamos gran parte del día, además, en ella se encuentran la mayoría de los electrodomésticos que se tienen en la casa. Las características de este sitio pueden llegar a incidir de forma directa o indirecta en nuestra salud y también en nuestra economía, sin dejar de lado al medio ambiente. Los alimentos que preparamos y el uso que hacemos del agua, de la energía y el manejo de los residuos son temas que no debemos dejar de evaluar a la hora de tener una cocina que sea amigable con el medio ambiente.
Para crear una cocina amigable deberemos considerar la posibilidad de reducir la huella de carbono, si bien no es una tarea fácil no es nada imposible. Hacerlo será un aspecto positivo tanto para la salud como para el bienestar de todos los integrantes de la familia. Sumarte a esta tendencia no es nada complicado, sólo deberás animarte.
Mediante una correcta elección de electrodomésticos podrás hacer la diferencia en el ahorro de energía. La nevera es uno de los artefactos que mayor consumo de energía genera. Psi tienes que comprar una nueva o reemplazar la que tienes elige algún modelo de categoría A o categoría B, que son mucho más eficientes. Otra medida que deberás tomar es abrir la puerta lo menos posible, descongelar el freezer periódicamente y mantener la temperatura que ronde los 6 grados.
La cocina o estufa deberá contar con difusores de hornallas, así podrás disminuir el consumo de energía Ademas permite que la cocción de los alimentos se de más pareja. Esto ayudará a reducir en un 20 por ciento la tarifa del gas.
Y por último nos referiremos al agua, si el agua de tu hogar no te genera ninguna confianza podrás agregarle un purificador o un filtro, una buena opción que no contamina y que es más económica que comprar agua embotellada todos los días