Cuando disponemos de una cocina de reducidas dimensiones, alojada en nuestra pequeña vivienda y donde todo se nos hace cada vez más pequeños… en esta tercera parte os damos unos consejillos para aprovechar al máximo vuestra cocina.
1. Aprovecha los espacios
Debemos conocer al milímetro nuestra cocina, aprovechar bien sus espacios hará que ganemos metros cuadrados. Es muy importante colocar estanterías aprovechando las paredes de la estancia, lugares de almacenaje donde se pueda; incluso detrás de los rodamientos de la encimera. Cuelga los artículos como cacerlas, cazos, sarténes y ollas del techo.
2. Beneficios de una cocina pequeña
No tiene por qué ser, necesariamente, un problema una cocina de reducidas dimensiones. A la hora de cocinar podemos contar con una mesa alargada, esta podrá ser un buen lugar para organizar a la hora de cocinar.
3. Olvídate de las puertas
Debemos intentar adquirir mobiliario de cocina con puertas corredizas o muebles, simplemente, abiertos.
Las puertas hacen que perdamos espacio y tiempo al abrirlas en lugares tan estrechos, siendo muy incómodas. Si ya tienes muebles con puertas, intenta colocar estantes auxiliares abiertos.
4. Iluminación
Lo ideal es una magnífica iluminación, ya sea natural o por medio de iluminación artificial; si tu cocina es larga pasará que en algunos espacios no haya buena iluminación. Lo mejor es hacernos con una fuente de iluminación, si puede ser de luz natural y ubicarlos en uno de los extremos de la cocina; sino, distribuir luces y lámparas será nuestra opción.
5. Conseguir una cómoda cocina
Evita colocar cualquier cosa en el suelo de nuestra estrecha cocina, la basura en el cubo, los artículos de limpieza en un lugar de almacenaje… si no tenemos compra cubos pequeños, escobas pequeñas y recogedores bajos. Estos podremos almacenarlos con mayor facilidad.
Utiliza los muebles para guardarlo y organizarlo todo ya que sino los artículos en el suelo nos quitarán mucho espacio para circular. Esto hará que nuestra cocina sea pequeña, pero cómoda.
No coloques cosas en el piso – como tachos de basura, artículos de limpieza, etcétera – porque te quitarán tu preciado espacio para circular. Utiliza los muebles para guardar las cosas y deja bien liberado el espacio para caminar, así la cocina siempre te resultará cómoda.