Buenos días amigos, hoy os dejo con algunos estupendos consejos para limpiar los suelos de tarima y los de parquet.
Ambos me encantan, cada uno ofrece cosas similares y distintas al mismo tiempo. Pero ambos pisos necesitan cierto mantenimiento.
Por ello hoy dejo algunos trucos muy sencillo de realizar, para la limpieza de suelos de este tipo.
La madera se dilata en verano con la calor, y se contrae en invierno. Es básico tener unos buenos rodapiés para que en el cambio de tamaño las tablas no se salgan de las hembrillas y se produzca la rotura de las mismas.
De la misma forma que limpiamos el mármol con un limpia suelos adecuado, debemos aplicar una capa de cera al parquet, al menos una vez en semana.
Pero demasiada cera puede hacer que se pierda el color original de la madera. Una lustradora para suelos dmadera es lo más recomendable para quitar los excesos.
Para la limpieza a diario se puede usar una solución de agua y un poco de vinagre, y humedecer ligeramente la mopa para hacer unas pasadas. Aunque también se puede usar el clásico producto limpiamuebles.
Se rocía sobre el suelo, y luego se pasa la mopa. Todo eso, obviamente, después de barrer o aspirar las posibles pelusas y restos de polvo.
Si percibes pequeños arañazos sobre la madera, hay un truco que puedes usar, y es pintar la zona con un rotulador de fieltro o de diseño gráfico, del color de la madera.
Si el arañazo fuera considerable, no queda otra que lijar la zona y volver a barnizarla, con mucho cuidado de que quede uniforme, e integrado en el resto del parquet.
Si observas algún bulto, bollo o similar, se puede recuperar aplicando un poco de agua para que la madera se humedezca y dilate, y cuando recupere la forma original, aplicar calor para evaporar.
Por muy buena que sea la madera, al cabo de unos 6 u 8 años perderá su brillo natural. Es el momento de trabajarla con una buena sesión de lijadora y barnizado.
Foto: woodenflooringsales