Para quienes gozan de la funcionalidad y el estilo vanguardista, los espacios exteriores se presentaban cómo un verdadero reto, ya que la posibilidad de respetar una línea de acción global en todos los espacios de nuestra casa, da verdadero sentido a la decoración y marca un diferencial enorme con otros estilos.
Enmarcados en la temática destaremos la evolución notable y efectiva en el mobiliario para el exterior, el cual si bien no genera un retroceso en su comodidad respeta dentro de su vanguardia las morfologías más clásicas del estilo.
Imitando tal vez mobiliario de origen señorial, o porque no las antiguas locaciones egipcias o griegas el mobiliario que podremos encontrar para decorar la playa de nuestra piscina es una verdadera disposición funcional y estéticamente adecuada a las tendencias que se implemente en el global de la decoración.
Quienes disponen de pequeños espacios notaran con sumo gusto y agrado los modelos plegables los cuales pueden disponerse en diferentes posiciones para presentarse cómo una pequeña mesa de café, o bien guardarse o almacenarse de forma efectiva liberando grandes cantidades de espacio cuando este es necesario.
La evolución de las materias primas por otra parte propicia que el mobiliario exterior cada día tenga mayores similitudes con el mobiliario interior, es por ello que encontraremos textiles completamente impermeables, resistentes al clima extremo y los peligrosos rayos UV, los cuales solían deteriorar nuestro mobiliario decolorándolo y dañando sus fibras.
A su vez notaremos cómo estas piezas sin importar el material en cual se confeccionan pueden interactuar con químicos tan poderosos cómo el cloro, algo infaltable en cualquier playa de piscina, es por ello que cuando nos referimos a la revolución en mobiliario exterior realmente notamos avances en todas las áreas no únicamente en su disposición morfología o tonalidades creativas pero impensadas en otro contexto.
Madera, mimbre, bambú, y polímeros de alta resistencia, conjuntamente con el hierro encuentran sus disposiciones más trasgresoras, imitando morfologías clásicas pero poseedores de una increíble vanguardia que los convierte en piezas únicas, muchas veces sensiblemente más detallistas y trabajadas que sus símiles de interior.