Recuerdo que cuando me presentaron a Nicolás, mi actual esposo, me quede sorprendida y hasta anonadada al descubrir que se trataba de un hombre que no sólo lucia muy bien sino de que tenía un muy buen sentido del humor, lo que me aseguraba que era inteligente, y un criterio estético plenamente desarrollado. El hombre, aunque muy austero en su forma de vestir, me mostró desde la primera conversación, que al igual que yo, valoraba y tenía un especial interés por la decoración, además de otras artes mayores.
No puedo decir que nuestra relación sea perfecta, ni siquiera cercana a muy buena, porque somos espíritus libertarios y realmente creemos en nuestras convicciones pero si puedo asegurar que hay un territorio en el cual somos almas gemelas y es en el del diseño. Hace poco compró, sin necesidad de mi intermediación, una mesa de centro para su oficina que por poco le robo para ponerla en casa. Ya tengo una en el salón así que solo se quedo en una de mis valiosas ideas.
La mesa de centro contemporánea, inspirada en el diseño de los años sesenta, RETROCONTEMPORARY fue diseñada por CALLIGARIS. Tiene tanto estilo como es práctica ya que tiene un cajón central debajo del tablero y dos a cada lado, que se abren por rotación. Las líneas limpias y la elegancia de sus curvas la convierte desde ya en un objeto clásico en la oficina de mi esposo, que ahora y por esto es fan del diseño italiano. Mayor información en la página Web www.calligaris.it