La Navidad es una maravillosa época del año que nos invita a recordar nuestros sueños infantiles y nos rodea de un cierto encanto y glamour que hace que queramos lucir nuestras mejores galas. Reflejar todo esto en nuestro hogar es una excelente manera de hacerle un regalo a nuestras casas y de celebrar con los seres queridos en un ambiente que refleje lo que sentimos en tan especial fecha.
Es importante ser conscientes que no debemos sobrecargar los espacios con adornos, luces, etc. Debemos crear una atmosfera navideña en el hogar con detalles en lugares estratégicos. No hay que colocar adornos en todos las áreas, ni sobre todos los muebles o rincones de la casa.
Combinar adornos navideños glamorosos, estilizados, llenos de brillo con los típicos adornos de corte más infantil, como botas, renos, santas, etc; va a hacer que todos los que habitan la casa se sientan reflejados e involucrados en el ambiente navideño de la misma. Y por qué nó!!! Despiertan nuestro niño interno.
Los muñecos “Cascanueces” de madera son verdaderamente hermosos, le encantan a nuestros niños, y a nosotros los adultos también; puedes utilizarlos en rincones, debajo de la chimenea o al pie del árbol.
Quizá los dos objetos más importantes son el árbol de Navidad y el “nacimiento”, “pesebre” o “belén”. Estos deben ser los protagonistas de la decoración. Si colocas uno o ambos, debes asegurarte de darle el lugar correspondiente y de no opacarlos con otros muchos adornos por el resto de la casa.
La mesa de comedor es un punto importante que debe exhibir elegancia durante toda la época navideña. En camino de mesa en color unicolor con detalles en oro o plata. Velas llenas de brillo. Si tienes alguna fuente o bandeja en plata o cristal de buena calidad úsala y coloca dentro algunas ramas de pino natural, piñones secos, hojas o flores de telas brillantes o quizá algunas bolas de árbol de las que son de vidrio.
Colaboración: Diseñandoando