Siéntate y archívate con estas sillas de diseño

Siéntate y archívate

sillas de diseño que se apilan fácil

Desde la primera mitad de los años noventa ha sucedido una transformación tecnológica en la forma en que nos comunicamos y ha resultado ineludible aceptarla. Casi de manera obsesiva tenemos en nuestras manos la posibilidad de acceder a información de todo tipo, la que queramos, y compartirla de manera ilimitada. Conexión telefónica inmediata y personalizada, video en directo desde cualquier confín del mundo, grabaciones de audio y de imagen en el momento que queramos y con reproducción instantánea.

El futuro si llegó pero la estética que esperábamos y que con tanto empeño nos mostraban los visionarios de los años setentas y ochentas no era la acertada. El futurismo se volvió retro y las nuevas imágenes nada tienen que ver con vestimentas plateadas, naves espaciales, luces de neón, ni con robots de aspecto humanoide, cromados y adornados con tornillos.

Siéntate y archívate con estas sillas de diseño

La estética del futuro, o sea, la estética de las comunicaciones y de la tecnología, tiene un elemento básico: el píxel. Todas las imágenes que vemos en las pantallas de la televisión, de los ordenadores, los móviles, los reproductores de audio y vídeo están construidas con una cantidad de píxeles por pulgada que según su calidad tienen mejor o menor fidelidad.

Y un poco más allá, y construidos con píxeles, están los nuevos signos y símbolos. Todos tenemos en mente el cursor en forma de flecha, la manzana blanca, las ventanas, usamos las tipografías específicas para medios digitales, somos familiares a las etiquetas, a los comentarios, a las pestañas, al diskette para guardar los cambios, a la lupa que nos permite buscar y a la carpeta amarilla en la que archivamos.
Ya pasados casi 20 años la iconografía píxel ha traspasado las fronteras de lo digital y ha tomado cuerpo en el mundo real. Aparece inicialmente en las camisetas, que son el espacio ideal en donde cualquier imagen se populariza y propaga, y ya vamos en lámparas, mesas y sillas.

También te puede interesar:
Flux Chair: la silla plegable de diseño

Un ejemplo de esta incursión de los iconos digitales en los espacios reales, no virtuales, es la silla FOLDER de la casa RITA, un estudio multidisciplinario de diseño gráfico, industrial y de amueblamiento localizado en Montreal, Canadá. La propuesta utiliza las proporciones del rectángulo típico del icono “folder”, con su singular pestaña, y lo convierte en el espaldar de una silla plegable, de un color verde “digital” y que apilada una sobre otra se ve muy “windows” o muy “mac” según las preferencias del usuario.

Mayor información en la página Web

Últimos artículos

Scroll al inicio