Las plantas dan vida a los espacios interiores y exteriores. Si tenemos con una terraza no debe hacer falta en ella una gran planta de sol para ambientarla, para crear sombras y darle color al espacio. Si somos tan afortunados y tenemos un jardín tarde o seremos expertos es especies florecidas, en trepadoras, en pastos y en exóticas. Si lo nuestro son los interiores, un salón amplio es perfecto para tener una de hojas grandes, con ella crearemos un centro de atracción visual. Un conjunto de pequeño tamaño provee una enorme sensación de frescura y humedad. Un bonsái dará un toque de distinción que nos hará enorgullecer ante nuestras visitas. Por medio de las plantas, de su cuidado y de su protección podremos inculcar en nuestros hijos el respeto por la naturaleza y desarrollar en ellos sentimientos de tolerancia, responsabilidad y sensibilidad medioambiental.
Puede ser que en nuestro piso no haya espacio para ninguna planta y solo podamos pensar en la posibilidad de colgar en la pared una foto de un cactus o en sacar un sillón y hacer algo de espacio. Una respuesta a nuestra plegaria la tiene la casa de diseño japonesa LEIF-DESIGN PARK pues han diseñado una original silla de dos plazas que además tiene adosada una maceta para planta. La silla ha sido creada para reavivar la conciencia, en sus usuarios, de que vivimos juntos a la naturaleza y que debemos convivir con ella de la mejor manera. El diseño, en madera de roble, genera una atmósfera confortable creada por la interacción de la naturaleza, el diseño minimalista del mueble y nosotros mismos. Mayor información en la página Web www.leif-designpark.com