Ante espacios pequeños, la decoración es el aliado perfecto para sacarle el máximo partido al espacio y convertir en virtudes lo que en principio sólo son carencias.
Siguiendo unas “normas” de decoración conseguiremos el objetivo deseado
Norma nº 1
Combinación de colores. La combinación de colores entre paredes y mobiliario cobra especial importancia en espacios reducidos.
No debe haber un contraste exagerado entre los colores de la paredes y los colores del mobiliario, ya que de esta manera lo único que conseguiríamos es acentuar la presencia de los muebles potenciando la escasez de espacio.
Norma nº 2
Colocación del mobiliario. En espacios pequeños debemos evitar siempre que el mobiliario se encuentre en zonas de paso y que obstaculice el tránsito. Cuanto más liberadas de mobiliario estén las zonas de paso, mayor será la sensación de amplitud.
Norma nº 3
Elección de los colores. Los colores suaves y fríos son íntimos amigos de los espacios pequeños ya que tienen el poder de iluminar y aportar sensación de amplitud: blancos, amarillos… En un espacio pequeño no utilices nunca colores oscuros o cálidos, ya que su efecto en la estancia será precisamente el contrario al de los colores fríos y suaves.
Norma nº 4
Iluminación. La iluminación también es un elemento de gran ayuda. Si diriges los puntos focales a las paredes y el techo crearás una sensación de altura y amplitud.
Norma nº 5
Elección del mobiliario. Existen determinados elementos como los espejos y cristales que son capaces de crear sensación de amplitud. Apostar por espejos y cristales en una casa pequeña es una apuesta segura.
El mobiliario en general, si son muebles pequeños, mejor. Los muebles más grandes ubícalos siempre contrala la pared.