¿La decoración de tu casa te parece un poco sosa y necesitas animarla? ¿Te hace falta un buen recurso decorativo que cambie el aspecto de tus espacios? ¡No sigas buscando! Sabemos lo que te hace falta: algunos espejos de pared únicos que realcen muebles y objetos y aporten un plus de luminosidad al ambiente. Aquí tienes algunas ideas que te ayudarán a conseguirlo.
Los espejos de pared únicos y muy decorativos son uno de los elementos que más me gustan para definir los ambientes. Y es que todo son ventajas a la hora de utilizarlos: quedan bien en cualquier habitación, ya sea el pasillo, el dormitorio o el salón, lo que es una ventaja. También son versátiles y capaces de adaptarse a todos los estilos decorativos.
Y, además, aportan a las habitaciones en las que se colocan un toque luminoso y especial, muy glamouroso independientemente de cómo sean el resto de elementos (muebles, complementos, textiles, etc.). Un espejo adecuado siempre mejora un ambiente.
Espejos de pared únicos para ampliar los espacios
Una de las cosas más importantes por las que resulta del todo apropiado colocar espejos de pared únicos en casa es su gran capacidad de ampliar los espacios. De hecho este tipo de espejos hacen que las habitaciones parezcan más grandes, siempre que estén colocados en el sitio correcto.
Es una cuestión de ilusión óptica, pero realmente funciona. Por eso son muy aconsejables en habitaciones de tamaño reducido en las que se consigue una gran sensación de profundidad colgando un espejo grande (o más de uno, ¡no tengas miedo!) en una determinada pared. Además, hay espejos tan bonitos que, si eliges los adecuados, no tendrás más opción que acertar de pleno.
Un plus de luminosidad
Otra de las cosas que se consiguen decorando con espejos de pared únicos es hacer que las habitaciones parezcan más luminosas, algo que no siempre resulta fácil de lograr si se trata de luz natural (con la iluminación artificial la cosa ya es otro cantar, puesto que podemos diseñarla a nuestro gusto y en función de nuestras necesidades).
Si colocas un espejo grande frente a una ventana, no solo reflejará el paisaje que se vea desde ella (eso sí, es importante que las vistas sean, cuando menos, agradables. No queremos potenciar lo que no nos gusta). También multiplicará la luz natural que entra del exterior, lo que convertirá a la habitación en cuestión en un espacio mucho más luminoso.
De la misma manera se puede colocar un espejo de pared delante de la mesa de comedor, por ejemplo, de forma que refleje una lámpara de techo suspendida sobre la mesa. El resultado será igualmente más luz para el espacio.
Otra forma de ganar sensación de amplitud y de mayor luminosidad es hacerte con algún mueble de espejo. Cierto que no se trata de espejos de pared únicos, pero resultan muy decorativos y también ayudan a aumentar la luz y la sensación de espacio. Entre mis favoritos están las consolas, las mesas auxiliares o los escritorios.
Utilízalos para reflejar lo que más te gusta
Ya que los espejos son recursos con tantas aplicaciones en la decoración de la casa y podemos conseguir tantas cosas a través de ellos, vamos a utilizarlos bien. A sacarles todo el partido posible.
Por eso, ¿por qué no colocarlos de una forma estratégica para que reflejen precisamente lo que más nos gusta de la casa? Seguro que encuentras la manera de hacerlo. Puede ser un cuadro que te apasiona, o un mueble al que le tienes especial cariño, una pieza decorativa de la que estás orgulloso o un conjunto de fotografías antiguas que has colgado de la pared…
No importa el qué, sino el cómo. Lo único que cuenta es que el espejo refleje, de la manera más natural posible, aquello que realmente nos gusta de nuestros espacios.
Aprovecha su potencia decorativa
Al margen de si necesitas espejos para crear sensación de amplitud o de luminosidad, estos elementos tan brillantes son capaces de redondear el interiorismo de cualquier ambiente. Todo depende de la forma en que se utilicen, aunque es difícil equivocarse.
Tendrás que valorar ciertos aspectos como si prefieres poner un espejo grande o varios pequeños. El tamaño de la habitación tiene algo que decir es esto. Si el cuarto es muy pequeño, puedes poner un espejo grande que cree una ilusión óptica para agrandarlo visualmente. Y si quieres decorar con espejos una pared grande, puedes optar por poner muchos diferentes. A mí me encanta esta manera de emplear los espejos para decorar.
¿Y si juegas al contraste? Coloca espejos muy clásicos, de marcos barrocos y repletos de dorados en espacios de vanguardia, de estilo minimalista. O espejos modernos de líneas contemporáneas en ambientes clásicos.
Con estas claves prácticas podrás elegir los espejos de pared que más te gustan y utilizarlos para decorar tu casa. ¡Anímate!