Hoy queremos contarte algunas ideas y trucos más que interesantes y prácticos parara organizar un espacio de trabajo, ya sea en casa o en la oficina. ¡Haz tu vida más fácil!
Estudies o trabajes, todos tenemos siempre algo pendiente que hacer. En verano solemos dejar siempre algo para casa y es que, se trabaja mucho más y mejor cuando estás cómodamente. El espacio de trabajo debe ser un lugar organizado, repleto de luz y sobre todo un lugar que te inspire para poder trabajar mejor.
Para conseguir un ambiente de trabajo y un entorno creativo de manera eficaz debemos tener en cuenta una serie de conceptos clave que aplicaremos para optimizar nuestras horas de trabajo. Hoy quiero contarte algunos detalles con los que, además de organizar el espacio en el que vayas a trabajar, lo harás de forma cómoda. ¡Si sigues estos consejos notarás la diferencia!
Organiza tu mesa
La organización en la vida es imprescindible. Tanto en la vida personal como profesional debemos tener un orden que nos permita ver todo con más claridad, alcanzar todo lo posible sin perder el tiempo y saber dónde está cada cosa. De la organización dependerá la eficacia de nuestro trabajo o estudio. Sé organizado, divide, clasifica y tendrás éxito.
Se suele decir que aquellas personas que son ordenadas en su vida, tienen la «cabeza amueblada», esto hace una referencia a la colocación de las ideas en la cabeza, o lo que es lo mismo, que es una persona organizada tanto en su vida como en su trabajo. Por eso, podemos optar por algunos detalles que, por pequeños que sean, pueden facilitarnos la vida de una manera muy útil.
Decora el espacio
Ningún espacio será más cómodo si no lo decoramos nosotros mismos. El toque personal que añadimos a un espacio de estudio o trabajo nos transmite la paz que nos hace falta para lograr mayor concentración. Y es que si estamos en un entorno agradable en el que nos sentimos cómodos, ¿cómo no vamos a rendir? apuesta por incluir colores, objetos personales, frases motivadoras para que sigas trabajando y además sonrías, estampados que te gusten en pequeñas cosas como pueden ser las cortinas, ventanas, detalles, cuadros, algunas luces extra e incluso ese ridículo dibujo que hizo tu sobrino y que te encanta. Esa será la manera en la que podamos trabajar con alegría, aquella que, miremos donde miremos, veamos felicidad.
Trabaja cómodamente
Optimiza el espacio, aprovecha al máximo los metros cuadrados de los que dispones. Y es que podemos crear un despacho en cualquier rincón del hogar. Ya sean veinte metros cuadrados o dos. Si somos capaces de organizar, crear, distribuir y colocar de manera correcta todos los elementos necesarios para considerarlo como un lugar de trabajo, conseguiremos el ambiente perfecto por muy pequeño que sea. La comodidad nunca estuvo reñida con el tamaño del espacio elegido.
Un consejo muy práctico es que tengáis un organizador para las semanas del mes o una agenda. Un pequeño cuaderno de notas en el que anotar todo lo que necesitamos, no solo en temas profesionales sino en temas personales. La compra, cosas que hacer, cosas que archivar, citas o reuniones importantes… En definitiva, algo físico que nos permita saber qué es lo que debemos hacer o nos queda por realizar durante la semana. Es muy práctico y es la única manera de no olvidar algunas cosas importantes.
En la oficina o en casa
Cualquiera que vaya a ser tu zona de estudio o trabajo vas a necesitar una serie de accesorios, complementos y objetos decorativos para no caer en la rutina diaria. Por ejemplo, un organizador de carpetas con un toque especial o tu sello personal, una estantería hecha por ti, un portalápices que nos haga sonreír cada vez que lo miremos y, por qué no, una pequeña nevera en la que guardar una bebida refrescante para guardar algún que otro capricho para deleitar el paladar entre horas de trabajo.
Normalmente, en las oficinas suelen tener algún lugar en el que hacer café, una nevera e incluso que se puede cocinar. Esta es una idea muy práctica porque apenas ocupa mucho espacio y además, ¡es muy divertido!
La única manera en la que vamos a estar más cómodos a la hora de trabajar va a ser hacer algún diseño hecho por nosotros mismos, añadir elementos con los que nos identificamos e incluso redecorar una oficina por completo a nuestro gusto con pequeños detalles que harán tu día a día más fácil. Lo más importante es que el paso del tiempo no haga que nos sintamos aburridos o frustrados y es que, es cierto que se trabaja mejor en un espacio lleno de luz y cosas bonitas que en una triste oficina, ya sea en casa o en el trabajo.