Estrenamos año y apetece muchísimo hacer cambios en casa, renovar habitaciones, imprimir más que nunca a los espacios nuestra marca personal. ¿A qué sí? En los dormitorios, podemos lograr ese giro espectacular con solo elegir un cabecero singular, de esos que no pasan inadvertidos. Es una pieza infalible para marcar carácter a su decoración. Este post va dedicado a ellos. A conocer qué es lo último en cabeceros.

Un cabecero original a más no poder, o con un gran estilo, puede ser suficiente para que el dormitorio adquiera una imagen distinta. Un plus decorativo en el que no habíamos reparado y que sin embargo logra que la habitación parezca otra. Y lo mejor de todo es que la regla nos vale para cualquier dormitorio. Es decir, no solo para el principal. También en los cuartos juveniles y en los infantiles estas piezas tienen un poder increíble de añadir personalidad, de acentuar un estilo o de apuntar otro. Lo último en cabeceros nos descubre materiales, diseños y soluciones que podemos aplicar ya mismo en nuestras habitaciones más íntimas.
Lo último en cabeceros: ilusiones ópticas impactantes

Hablar de lo último en cabeceros es pensar también en materiales innovadores, en interesantes soluciones que se van incorporando al mundo del interiorismo y la decoración. Pues bien, aquí va una de esas novedades que no se pueden dejar pasar: los revestimientos cerámicos que imitan a la madera con un realismo asombroso y que son perfectos para hacer cabeceros de obra de lado a lado de la pared. Entre los principales atractivos de este material, sin duda la fuerza visual que desprenden y contagian a la estancia. Son una opción 10 para dotar a un dormitorio urbano una calidez moderna y rotunda a la vez. Colocados como si fueran anchos y rudos tablones de madera, consiguen la ilusión óptica de tener un cabecero de madera robusto y compacto, con sus vetas desdibujadas y sus tonalidades degradadas. La elección ideal cuando buscamos acentuar el carácter del dormitorio con una nota de naturalidad. Un toque rústico actualizado a nuestros estilo. Lo último en cabeceros ofrece estas propuestas y más. Te sigo contando.
Diseños pintados que marcan la diferencia

Cuando se trata de añadir una gran dosis de elegancia a nuestro dormitorio, incluso un toque sofisticado, merece la pena apostar por ideas de las que causan sensación estéticamente hablando. Ideas que a priori quizá encontramos un tanto arriesgadas y después son un éxito asegurado. En estos casos hablar de lo último en cabeceros va de la mano de la creatividad. De explotar al máximo las posibilidades espaciales de la habitación para desplegar una idea realmente cautivadora. Observemos qué cualidades potenciales tiene nuestro dormitorio, seguro que bastantes.
Por ejemplo, los cabeceros pintados en la pared con patrones geométricos son una elección genial para lucirse en estancias amplias y techos altos. Centrarán todo el foco visual en ellos, de manera que es importante pensar muy bien el diseño que vamos a plasmar en la pared: dibujos muy minimalistas, entramados más barrocos, composiciones de inspiración romántica, etc. El tipo de luz que recibirán, natural o artificial, también es un factor a tener en cuenta a la hora de elegir colores, y de saber de antemano si se proyectarán sombras o no. Los dibujos más sencillos los puede hacer uno mismo con la ayuda de una plantilla. Otro aliciente más si te declaras un amante del DIY. Al margen del diseño elegido, se convertirán en esos aliados indiscutibles para dar una personalidad única al dormitorio. A los lados de la cama, unas lámparas de techo de diseño enmarcarán la composición con sutileza y funcionalidad.
Versiones románticas en clave moderna

Lo último en cabeceros no deja de lado las propuestas románticas y sensuales. Todo lo contrario. En concreto son esos modelos que introducen en los dormitorios de casa una nota nostálgica, femenina, con discreción. En su justa medida. Esto es lo que ocurre con los cabeceros tapizados en capitoné pero muy alejados de sus líneas clásicas. Lo interesante es cómo se presentan, con una imagen actualizada y fresca. En una palabra, estos modelos se caracterizan porque ofrecen una versión más moderna. Lucen tapizados extremadamente sencillos, a ser posible en tonos marfiles, o blancos hueso, rematados con pequeñas tachuelas en oro viejo. Son perfectos compañeros para poner un toque de distinción a dormitorios principales de aire escandinavo, estancias de invitados. O en dormitorios juveniles decorados con una atmósfera súper natural y muebles blancos.
El cuarto juvenil, con un mural artístico a lo grafitero

Cuando se trata de dormitorios juveniles, nada como optar por modelos creativos cien por cien, o propuestas informales si queremos que la estancia emane encanto. Así se diferenciará de las decoraciones habituales. Tal vez unos simples dibujos silueteados en la pared logren esa nota singular. Un simpático toque grafitero para la decoración.
Ahora bien, lo último en cabeceros para este tipo de habitaciones puede requerir soluciones de espíritu más práctico. No olvidemos que estas piezas también pueden cumplir un papel funcional. Siempre que las necesidades de uso de la estancia lo precisen. Y muy probablemente el almacenaje de libros y material de estudio sea una de ellas. Las composiciones modulares con cubos pueden dar un juego increíble. Y sin dejar de ser un tanto original.
Piezas de fantasía para el espacio de los peques

Sin duda también los cabeceros tienen mucho que aportar en la decoración de los cuartos infantiles. Pueden ser los grandes protagonistas planteando efectos y sensaciones muy diversas: poniendo un toque de ilusión y fantasía, despertando la imaginación de su habitante, o integrándose en el conjunto de la decoración de una forma más atemporal. Desde entrañables modelos en forma de casita, a diseños vintage o al más puro estilo nórdico. Lo último en cabeceros puede ser así de divertido cuando pensamos en dar personalidad a sus espacios. Espero que te hayan gustado. ¿Ya te has decidido por alguno?