Estamos conscientes de que nuestra casa debe ser también la de nuestros seres allegados en sus momentos de necesidad, que es nuestra obligación ofrecerla cuando requieren de un poco de ayuda. El techo que brinda el hogar que tenemos es añoranza de muchos y cuando recibimos la petición por parte de un amigo de que le prestemos nuestro salón, en ausencia de cuarto de invitados, para pasar un par de noches en la ciudad, ya que está de visita, se ha inundado su casa o, sencillamente, ha sido exiliado por su esposa, no podemos decir que no.
Sabemos bien lo difícil que es pedir este tipo de favores porque nosotros mismos nos hemos visto beneficiados con la generosidad y amabilidad de muchas personas a lo largo de nuestra vida. Pero, también es cierto que a pesar del deseo de colaborar, una visita rápidamente se convierte en un peso pues requiere de atención, de disposición, y sobre todo de nuestro salón. En esto casos la pérdida de nuestra privacidad, y de la de nuestro huésped, se hace evidente después del tercer día.
Para poder extender la vida sana de nuestras visitas, por lo menos unos tres días más, el diseñador PHILIPPE MALOUIN ha creado el sofá-cama TENT, para la casa fabricante italiana CAMPEGGI. El objeto fue crear una pieza que por medio de cambios en la disposición de sus componentes transformara sus posibilidades de uso, sin perseguir la idea de hacerlo radicalmente sino dándole por medio de alguna variación un valor adicional al tradicional.
Este sofa-cama permite combatir la falta de privacidad de dormir en un salón, creando un espacio más privado y protegido de la luz, la temperatura y el ruido. Desdoblando las superficies del espaldar y los brazos, fabricados en poliuretano, podremos conformar un nicho de protección.
Mayor información en la página Web philippemalouin.com