El metacrilato, también conocido con las siglas PMMA, es un material plástico que se utiliza, entre otras cosas, como sustitutivo del vidrio. Su porcentaje de transparencia es del 93%, mientras que el del vidrio es un poco menor, del 90%, por lo que es ideal para crear placas y urnas que protejan los productos que se coloquen en su interior a la vez que permiten exhibirlos.
Tipos de metacrilato
Existen dos tipos de metacrilatos: el de extrusión y el de colada.
El de extrusión es una mezcla de varios tipos de plásticos reciclados mezclados entre sí. Se Este tipo de metacrilato es de menor calidad.
El metacrilato de colada se realiza con un único tipo de plástico y su calidad es bastante superior a la que ofrece el metacrilato de extrusión.
Aparte, existen tres familias diferentes: opal, no opal y transparente.
El opal, que deja pasar la luz, pero no deja ver a través de él.
El no opal que no deja pasar la luz y tampoco deja ver a través de él.
El transparente que deja pasar la luz y permite que te puedas ver a través de él. Este tipo es ideal para la fabricación de urnas, vitrinas o mamparas de ducha.
Al margen de los distintos tipos de metacrilato que hay, se puede trabajar diferentes colores –transparente, blanco, rojo, verde, morado…–, distintos grados de grosor y de robustez.
5 ventajas de este material: por qué escoger urnas de metacrilato
El metacrilato es muy utilizado tanto a nivel industrial como en los hogares porque ofrece una serie de ventajas determinantes en comparación con otros materiales. El material con el que más se le compara y que, incluso, puede generar confusión a simple vista es el vidrio, ya que ambos materiales pueden ser transparentes; sin embargo, el metacrilato en líneas generales ofrece un rendimiento superior.
En primer lugar, se trata de un material muy resistente a los golpes. Es capaz de aguantar golpes de gran fuerza sin que se llegue a romper y, desde luego, sin que estalle en una gran cantidad de pedazos diminutos.
En segundo lugar, es más ligero que el vidrio, por lo que resulta mucho más manejable y apropiado que el vidrio para crear elementos como, por ejemplo, el típico marco de fotos. En cuanto a las urnas, es mucho más cómodo y sencillo una urna de metacrilato que una de vidrio, sobre todo si se trata de urnas de gran tamaño y, por tanto, de un peso mayor.
En tercer lugar, en caso de rotura es mucho menos peligroso. Eso no quiere decir que no pueda llegar a provocar cortes y laceraciones, pero desde luego es mucho menos lesivo que un trozo de vidrio y mucho menos cortante.
En cuarto lugar, hay que destacar la visibilidad. Aunque en este caso y en comparación con el vidrio la mejora no es significativa, sí que permite una mejor visión gracias a su mayor grado de transparencia, un factor determinante en la creación de urnas de exposición.
En quinto lugar, otro de sus puntos fuertes es su gran longevidad. Se trata de un material que tarda mucho tiempo en deteriorarse, lo que unido a su resistencia a los golpes lo convierte en una opción ideal para crear elementos que vayan a estar ubicados en el interior de un edificio, pero en especial, si estos van a estar situados en exteriores.
Qué usos se le da al metacrilato
El metacrilato tiene una gran cantidad de usos en la actualidad. Uno de sus principales usos es en la fabricación de urnas de exposición. Una estructura cuadrada o rectangular de metacrilato transparente con unas dimensiones que pueden variar según lo necesite el cliente. En el interior de las urnas se pueden colocar objetos y productos. Las urnas de metacrilato son habituales en museos y exposiciones para exhibir objetos valiosos como monedas antiguas, utensilios, restos extraídos de excavaciones arqueológicas, piezas de arte y maquetas, tanto con fines artísticos como comerciales.
También se utiliza para crear banderolas y rótulos. Ambas creaciones de metacrilato se pueden hacer sin luz o con luz. Para los elementos luminosos se utiliza el metacrilato opal ya que permite que la luz pase de fuera hacia dentro, pero no al revés, evitando así que quede visible el sistema de iluminación, lo que afearía el rótulo o la banderola. Estos dos elementos se usan mucho como reclamos comerciales y son piezas indispensables en la cartelería de las empresas.
También se utiliza para crear láminas decorativas para adornar los hogares o los locales comerciales con un acabado profesional, limpio y elegante.
Al margen de estos usos, este material se puede trabajar de múltiples formas y combinaciones para conseguir el acabado que cada cliente necesita, siendo un elemento indispensable para la exhibición de objetos en museos, pero también en la rotulación de elementos de identidad corporativa.
Consejo final
El metacrilato, como cualquier otro material, necesita que se limpie para tener un mejor aspecto y que siga luciendo transparente y nítido. A la hora de limpiarlo, no utilices productos abrasivos, ya que un uso continuado de los mismos acabará amarilleándolo y restándole transparencia. En vez de eso, utiliza productos de limpieza neutros como el limpiacristales de toda la vida.