El DIY (Do It Yourself), que en su traducción al español significa »Hazlo Tú Mismo», en los últimos tiempos ha ido adquiriendo cada vez más fuerza en le mundo de la decoración. Y es que es una manera perfecta para realizar objetos adecuados y adaptados a la decoración en que se pretenden introducir.
Si te gustan las manualidades y el reciclaje y la reutilización de viejos elementos aparentemente inservibles, hoy te proponemos una idea muy simple, pero también muy práctica y muy original que te va a gustar. Se trata de reutilizar un viejo rastrillo y convertirlo en un práctico complemento para la cocina o el salón en el que colgar las copas.
Este es el resultado de la idea que te proponemos:
Original, ¿no crees?
Y como puedes ver en la imagen, lo único que hay que hacer para llevar esta idea a la práctica es colgar ese viejo rastrillo… Y una vez colgado, sólo hay que colocar en él las copas boca abajo.
En este caso se pretendía obtener un elemento decorativo que siguiera la línea y estética de estilo rústico con el que cuenta el resto de la decoración. Sin embargo, esta es una idea que se puede adaptar a cualquier espacio y estilo decorativo, para ello sólo tienes que pintar el rastrillo o, por ejemplo, decorarlo con la técnica del decoupage.
Es un idea muy simple. Sí. Pero también es una idea que ofrece un resultado muy original…
¿Te animas a ponerla en práctica?