Encontrar muebles para restaurar a buen precio es una estupenda manera de decorar nuestra casa. Todo son ventajas: le damos a cosas en buen estado una segunda oportunidad. Además, conseguimos piezas únicas que enriquecerán nuestros interiores, y ahorraremos dinero. ¿Se puede pedir más?
Es sorprendente cómo pueden cambiar los muebles para restaurar si se les da el tratamiento adecuado. No hay nada más mágico que ver cómo una pieza vieja y poco agraciada se convierte en un mueble sofisticado y elegante, perfecto para decorar cualquier ambiente, sea este del estilo que sea. Yo he visto muchas veces cómo se producía esta transformación. Cómo ciertos muebles viejos y anticuados se convertían en las estrellas de la decoración.
A veces hay que llevar a cabo una importante restauración, un trabajo destinado a los especialistas, pero la mayor parte de las ocasiones no es así. La transformación suele realizarse de una forma sencilla por lo que cualquiera que se lo proponga puede hacerlo.
Al principio, elige muebles para restaurar que sean pequeños
A no ser que seas todo un experto en restauración de muebles o, si no un experto, sí un aficionado que ya haya reparado y reciclado unas cuantas piezas, no quieras comenzar por lo más difícil. No tiene sentido querer restaurar algo que está muy deteriorado, ni una pieza demasiado grande cuando no tienes mucha experiencia.
Lo mejor es comenzar por muebles de tamaño reducido a los que les haga falta un buen lavado de cara, pero que estén en buenas condiciones. Pueden ser piezas aburridas y feas, anticuadas, pero que tienen por delante mucho camino por recorrer.
Como, por ejemplo, esta mesilla de noche que te enseñamos ya hace un tiempo. Puede que no fuese muy bonita, pero estaba en buen estado. Y con una mano de chalk paint quedó… ¡genial!
Lugares en los que buscar: mercadillos y desembalajes
Hace algunos años era muy habitual encontrar junto a los contenedores de la basura muebles para restaurar realmente increíbles. Algunos estaban en perfecto estado y otros más deteriorados, aunque eso era lo de menos. Lo de más era que se trataba de auténticas joyas, antigüedades con un valor -sino económico sí estético- que te hacía preguntarte cómo sería la persona que había tirado aquella maravilla a la basura. Pues bien, eso hace muchos años ya que no sucede.
Hoy si quieres hacerte con buenos muebles para restaurar, tienes que pasarte por una tienda de antigüedades y dejarte allí bastante dinero. O puedes rescatar muebles antiguos (o más bien viejos) de algún mercadillo especializado.
En este sentido merece la pena visitar los desembalajes. Se llaman así porque los anticuarios (o los propietarios de las almonedas) se reúnen y vacían sus camiones en la calle y los ponen a la venta. Puedes consultar en internet (hay varias web que ofrecen esta información) las fechas y lugares donde se celebran estos desembalajes. ¡Merece la pena darse una vuelta por alguno de ellos, aunque al final no compres nada!
Las tiendas de segunda mano
Una alternativa que me parece genial son las tiendas de segunda mano. Esa cultura de reutilizar lo usado, con el justo valor que tiene, me parece genial. Estaba muy arraigada en Europa aunque en nuestro país aún nos cuesta un poco asumirla…
De todas formas, puede ser por las circunstancias del momento o quizás porque ya vamos adquiriendo esa forma de pensar moderna y vital de que reciclar y reutilizar no solo es necesario sino que es cool. El caso es que cada vez van surgiendo más tiendas de segunda mano en todos los barrios de las ciudades grandes.
La idea es sencilla: alguien se deshace de un mueble viejo porque ya no le gusta y no lo quiere, y otra persona encuentra el mueble que estaba buscando a buen precio. Eso sí, normalmente hay que restaurarlo un poco, aunque a veces (como en el caso de la mesilla que te mostraba antes) solo necesita un cambio de look que se consigue fácilmente con pintura.
¿Y la versión online?
Las tiendas físicas de segunda mano tienen su versión online en internet, donde también podrás encontrar muebles para restaurar bastante económicos. Eso sí, no esperes encontrar gangas todos lo días.
Pero si lo intentas y buscas con afán puedes encontrar muebles muy especiales por poco dinero, igual que en las tiendas tipo Rastro Betel o los desembalajes. Puedes explorar las secciones de muebles de Wallapop o Vibbo. Nunca se sabe…
Antes de comprar…
Lo primero que has de tener claro antes de comprar un mueble de segunda mano es que te guste, que te apasione. Si has topado con una de esas piezas especiales que te ha cautivado desde el principio, merece la pena pararse a pensar: si lo necesitas de verdad, si tienes un lugar donde ponerlo, si puedes arreglar tú mismo sus desperfectos, si vas a restaurarlo y cómo, etc.
Tener todas estas cosas claras antes de comprar por impulso, solo porque la pieza que has encontrado es barata, te facilitará mucho las cosas. Y si algo no te cuadra piensa que, sencillamente, no era para ti.
