Las habitaciones de los niños son unos espacios muy cambiantes, sobre todo en los primeros años de desarrollo. Cuando llegan a una cierta edad los cambios dejan de ser tan bruscos. Cuando son bebés la habitación debe decorarse con tonos suaves, buscando la calma y tranquilidad del pequeño y evitando demasiado estímulos que lo alteren.
Cuando empiezan a crecer, con 2 ó 3 años, los niños se encuentran en pleno desarrollo y necesitan a su alrededor elementos que los estimulen y potencien sus capacidades, con los cual los tonos apagados se sustituyen por los colores vibrantes, llenos de color y contraste. Esto es algo que saben bien en la empresa Bm2000, dedicada a la creación de mobiliario moderno y diseño, especializados en mobiliario juvenil.
Desde siempre se ha caracterizado por la calidad en sus acabados, modernidad en sus planteamientos y combinación de estiló clásico y funcional, con las últimas tecnologías y tendencias recientes. Las imágenes hablan por si solas.











