Si eres de las que tienen las camisetas revueltas, los cinturones enrollados y dos pantalones por percha, sigue leyendo porque quizá estas lecciones sobre distribución de armarios te ayuden a ordenarlo y alargar la vida de tus prendas.
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Todas, alguna vez, hemos soñado con tener un enorme vestidor. Camisetas ordenadas por colores, pantalones por tejidos, tacones por alturas y complementos a parte para completar el look. Y al lado, un enorme espejo y una buena luz natural. Demasiado perfecto para ser cierto, ¿no? Nos tendremos que conformar con seguir soñando y aprender más sobre la distribución de armarios. Puede que no sea tan grande como un vestidor pero nuestro armario (pequeño, grande o empotrado) puede quedar tan ordenado (o más) como uno de esos que se ven en las películas. Solo tenemos que aprender algunos trucos sobre distribución de armarios y listo. ¿Aceptáis el reto?
Consejos para la distribución de armarios
Cómo ordenar las camisetas
Las camisetas se pueden guardar dobladas. El problema viene cuando apilamos demasiadas en una torre, ¿te suena, verdad?. Su propio peso las ‘aplasta’ y empiezan a marcarse los pliegues por las que están dobladas. Pues bien, lo ideal es apilar dos o tres camisetas, nunca más. Si no, a la hora de ponértelas estarán tan arrugadas como si no las hubieras ordenado nunca.
En el caso de que vuestro armario no tenga baldas, estanterías, sea muy pequeño o sólo dispongáis de una cómoda con cajones, podéis optar por aplicar el método Konmari con vuestras camisetas. ¿No conocéis en qué consiste? Tranquilos porque, más abajo, os lo cuento. Pero para los impacientes… así es como quedaría el resultado.
Cómo organizar los pantalones
La mayoría colgamos los pantalones en una barra en lo alto del armario. Y no está del todo mal, porque queda espacio suficiente para colocar, debajo, algunas baldas con camisetas o zapatos. Sin embargo, hay medios como éstos módulos extraíbles que permiten ahorrar mucho más espacio. Por ejemplo, estos ‘pantaloneros extraíbles’ aprovechan el fondo del armario y ahorran en el ancho (ya que solo ocupan lo que ocupa el ancho de un pantalón). Además, lograrás que no se arruguen y podrás ver todos los pantalones en un primer vistazo (cosa que no consigues con la barra).
Cómo organizar los zapatos
Si tuviéramos un zapatero prodigioso como el de Sarah Jessica Parker no habría problema en organizar nuestros zapatos. Pero como no lo tenemos, toca buscar soluciones originales. Porque a veces, el tamaño no es lo más importante, sino lo práctico y lo bonito que puede quedar un zapatero dentro del armario. Como éste que vemos en la fotografía. No te estanques en la tradición de dejarlos en un mueble en la entrada de la casa o a los pies del armario de tu habitación. Hay maneras tan originales como ésta que además, te ayudarán a ahorrar un montón de espacio. ¡Y no se pisarán unos pares con otros!
Cómo organizar los complementos
Ya os contamos en post anteriores cómo hacer un organizador para el maquillaje o para las pulseras, pero hoy hablamos de otros complementos. Los complementos textiles: bufandas, pañuelos, sombreros, diademas… La mejor forma para ahorrar espacio con ellos es enrollándolos formando un cilindro y organizarlos individualmente. ¿Cómo? en cajitas o, como se ve en la fotografía, en cilindros que puedes hacer tú misma con tubos de cartón. No temas por estos complementos porque de esta forma (aunque no lo parezca) no se arrugan. Si te sobra espacio, puedes incluir otra caja para los guantes y gorros de invierno. Los sombreros, las joyas y las gafas de sol, mejor fuera de los cajones.
Ordenar la ropa interior
No importa las veces que la ordenemos porque siempre acaba descolocada, mezclada y arrugada, ¿no? Pues bien, la clave está en hacer separaciones con cajas de cartón. ¿Los calcetines? no hagas una bola con ellos, dóblalos verticalmente y colócalos en fila. ¿Los sujetadores? Sobra decir que si los doblamos, los retorcemos o los aplastamos, es más que probable que se deformen y no queden igual puestos. Colócalos como en la fotografía, todos mirando hacia el mismo lado en cajas más anchas o uno sobre otro pero siempre estirados. Y por último, divide las braguitas de los tangas, evitarás que se enrollen y será más fácil encontrar lo que buscas para cada momento.
Método Konmari para organizar el armario
¿Todavía no conoces este método? La responsable de tal revuelo se llama Marie Kondo, una japonesa convertida en celebrity por mostrar al mundo su revolucionario método de distribución de armarios. Nuevas formas de doblar las prendas, innovadoras ideas para colocarlas… Todo ello lo ha recogido en un libro (que seguramente te suene por haberlo visto en el metro, en las redes o en alguna revista) llamado La magia del orden que, por cierto, ya ha vendido millones y millones de ejemplares y cuyo lema puede resumirse en “La verdadera vida comienza después de poner tu casa en orden”.
5 tips para una distribución de armarios Konmari
Si eres de las que todavía no lo ha leído, aquí te dejamos 5 trucos que te puedes encontrar entre sus páginas. ¡Hay muchos más pero no tendría gracia si os desvelamos todos!
- Deshecha: elimina lo que no usas y deja lo que realmente te gusta y te hace feliz.
- Ordena por categorías: es decir, si todo es ropa, todo debe ir junto. Nada de ir habitación por habitación. Toda la ropa debe estar en una misma estancia.
- Ordena del tirón: este método tira por tierra todo lo que habíamos creído hasta ahora. Nada de ordenar poco a poco y dejar montones de ‘duda’, si ordenas, tienes que hacerlo del tirón, en un día para cambiar la mentalidad y el espacio drásticamente.
- No hacen falta productos de almacenaje especializados, basta con una caja de zapatos.
- Dobla la ropa de tal manera que ahorres espacio (es este el punto neurálgico del libro)
Y ahora que ya tenemos todo organizado solo queda mantenerlo así el máximo tiempo posible. Si no, el esfuerzo habrá sido en vano. ¿Conocíais el método de distribución de armarios Konmari? ¿lo habéis probado? ¡estamos deseando nos contéis vuestra experiencia! Y si quieres seguir con el zafarrancho, te dejamos con estos consejos para organizar el baño. ¡Ya que nos ponemos, hacemos organización general!
