¿Te parecen aburridas las paredes de tu casa? Olvídate de la pintura y del papel pintado y da un paso más allá. Hoy puedes elegir otros materiales más originales para revestir las paredes y decorar todo tipo de ambientes.
Si, en lo que a esquemas decorativos se refiere, eres como la gran mayoría de la gente, entonces tus paredes estarán pintadas, puede que de color blanco o de cualquier otro color. O quizás haya alguna que esté empapelada con un papel pintado, ya sea este de diseño retro, floral o más discreto. En cualquier caso, existen otras formas de revestir las paredes.
Aquí tienes algunas alternativas que merece la pena explorar si estás reformando o decorando tu casa y quieres darle a los espacios un plus de originalidad. Comienza por las paredes y deja la pintura y el papel pintado para las casas del resto de la gente. La tuya es especial y vas a dejarlo claro comenzando por revestir las paredes de una forma diferente.
Elegir la cerámica para revestir las paredes
Son muchos los materiales que pueden utilizarse para revestir las paredes. Las baldosas de cerámica son una opción, aunque por regla general quedan relegadas a la cocina y al cuarto de baño. La razón es que se trata de un material que soporta muy bien la humedad, por lo que era la opción más frecuente para estas zonas húmedas de la casa.
Sin embargo, las posibilidades decorativas de la cerámica hoy día han aumentado tanto, que no podemos dejar que quede oculta en cocinas y baños. Es casi obligado sacarla al resto de la casa y utilizarla para revestir las paredes del salón, el recibidor, el comedor o el dormitorio.
Ahora puedes elegir formatos cerámicos diferentes, con pieza extragrandes o pequeñas y de distintos tamaños. También hay acabados muy originales, con efecto metalizado, que imitan otras texturas y materiales, etc. Todo un mundo por descubrir.
Una ventaja que tiene la cerámica a la hora de revestir las paredes es que, además de decorar, nos ayuda a disimular defectos en caso de que existiesen. Además, se instala muy fácilmente y es un material muy resistente, tanto al desgaste como a las manchas y al trote diario.
Una pared de ladrillo visto
Es otra opción si quieres darle a tus paredes un toque diferente. Utilizar ladrillo visto, ya sea auténtico o de plaqueta que imita este material, es una idea estupenda para decorar un ambiente con un estilo industrial o rústico. El ladrillo visto armoniza a la perfección con ambas tendencias decorativas y, además, queda genial junto a otros materiales como la madera, el acero o el cemento pulido.
Una idea decorativa que avanza un paso más consiste en combinar ladrillos de diferentes tonalidades. También encuentras ladrillos o plaquetas con acabado envejecido o de colores que se salen de lo habitual. Son guiños que te ayudan a no caer en lo convencional a la hora de revestir las paredes de tu casa.
Para no abusar, lo mejor es elegir una de las paredes de la habitación y decorarla con ladrillo visto, dejando el resto con pintura. O elegir este revestimiento para un pilar, un muro o una parte de la pared. El objetivo es no abigarrar demasiado el espacio.
La madera cálida
¿Necesitas un material que aporte calidez y naturalidad a tu casa? ¿El ambiente se ve desangelado y frío? Puedes optar por revestir las paredes con madera. No encontrarás un material más cálido y acogedor. Solo tienes que elegir el color y el acabado que armonice con el estilo de la decoración.
Las posibilidades para revestir una pared con madera son muchas. Puedes elegir hacerlo de suelo a techo, o poner simplemente un friso hasta media altura. Opta por madera natural o píntala de tu color favorito. No hay límite para tus preferencias decorativas.
Para orientarte en términos generales, piensa que los colores oscuros resultan más pesados, por lo que es mejor dejarlos para estancias amplias o utilizarlos con medida, en una sola pared, por ejemplo. Los tonos de madera más claros o los acabados con pintura en blanco son más ligeros y no recargan los ambientes.
El mármol, ese gran desconocido
En un principio podría parecer que su tiempo ha pasado. Y es cierto que el mármol vivió su momento álgido allá por la primera mitad del siglo XX. Sin embargo, un material natural de tal belleza no puede pasar de moda. El mármol es la opción perfecta para revestir las paredes si queremos ambientes elegantes, diferentes, originales y con glamour.
Es cierto que durante mucho tiempo ha estado relegado a cocinas y baños, pero hoy hay ejemplos que demuestran que es válido para cualquier estancia. Aunque la variedad de mármoles que existen es casi infinita, los colores claros te ayudarán a aportar mayor luminosidad, mientras que el negro y los colores oscuros dotan de una elegancia increíble cualquier espacio donde se instalen.
Cemento pulido, para un toque neutro
Necesitas revestir tus paredes con un material sencillo y versátil, que sea capaz de aportar un toque neutro y de armonizar con elementos de estilos diferentes. El cemento es lo que estás buscando.
Las paredes de cemento pulido son esenciales y muy atractivas. Combinan estupendamente con madera, con cerámica, ladrillo visto o cualquier otro material. Quedan genial en ambientes de estilo contemporáneo, pero también en decoraciones de aire rústico o industrial.
Como puedes comprobar, hay otras alternativas para revestir las paredes, además de la pintura o del papel pintado. ¡Explóralas!