Vamos con la segunda parte de consejos para que tu hogar sea seguro para los más pequeños.
Los enchufes nos han dado más de un susto a todos independientemente de nuestra edad, y es por eso que hay que tener especial cuidado con los peques. Hay aparatitos que se venden en tiendas especializadas para niños que son como una especie de tapa para bloquear que los niños les entre la curiosidad y metan los dedos o cualquier objeto (según cuentan, yo metí dos palitos en un enchufe de pequeña y les di un buen susto a mis padres).

Otra cosa con la que me dio por jugar cuando era pequeña fue una especie de estufa de gas, que hizo que con tres años tuviera las manos vendadas durante meses gracias a las quemaduras que me hice al poner las manos encima. Por lo que si quieres evitar que te dé algo al ver a tu hijo acercándose a este tipo de cosas, es recomendable que no cocines con el crio en brazos ni que lo dejes cerca de la cocina. Resumiendo: los niños pequeños y la cocina no son compatibles con la seguridad.
Otro punto muy a tener en cuenta como te decía al principio son los productos peligrosos como los productos de limpieza y los productos tóxicos que pueden ocasionar que lo toquen y se lleven las manos a la boca. De las bebidas alcohólicas ya no hace falta que te diga nada, y de los tapones mucho menos. Pero no solo tienes que tener cuidado con ello, sino con las bolsas de plástico, monedas, botones e incluso medicamentos. Tienes que ser consciente de que cualquier tontería que tengas por la casa puede resultarles atractiva y ya si tienen colores ni te cuento.

Estas son mis recomendaciones por hoy, espero que te hayan sido útiles y que puedas aplicarlas si tienes un pequeño viviendo en casa. ¿Hay alguna recomendación más que tu añadirías?