Restaurar un mueble. Cambiar por completo su aspecto, renovándolo por dentro y por fuera. En ocasiones el cambio es tan profundo que no parece tratarse de la misma pieza. Como el proyecto que te presentamos hoy: actualizar una cómoda de madera anticuada para convertirla en un mueble que todos querrían tener. ¿Quieres saber cómo se hizo? Te lo contamos paso a paso.
Todos hemos visto más de una vez el cambio que puede experimentar un mueble cuando cae en las manos adecuadas. Así, conocemos piezas que parecían tener como único destino el contenedor de la basura y que se han transformado en muebles preciosos.
Como este bonito armario que se pintó en naranja con chalk paint para cambiar su apariencia vieja y antigua. O esta mesilla de noche decorada con motivos geométricos. En ambos casos el mueble resultante no tenía nada que ver con la pieza original, y la superaba con creces en belleza y estilo.
Como ocurre con esta cómoda anodina y sosa que, tras pasar por las manos de Barb Blair, de Knack Studios, cambio totalmente dando un giro más que radical a la decoración. Para lograrlo tan solo hizo falta un poco de pintura gris, un papel pintado y la habilidad de la restauradora. Te contamos el proyecto DIY paso a paso.
Una nueva vida para esta cómoda de madera
El proyecto de renovación de este mueble no es complicado. Consiste en actualizar una cómoda de madera que, a pesar de estar ligeramente deteriorada, tenía la estructura en buen estado y guardaba todavía bastante belleza.
Tenía cuatro cajones, dos grandes y dos pequeños, y le faltaban los tiradores. Lo primero que debes hacer es asegurarte de que el mueble no está afectado por carcoma, polilla y demás afecciones de la madera. En caso de que lo esté, tendrás que tratarlo previamente.
Si tu cómoda de madera está bien, comienza por reparar los posibles desperfectos de las estructura: encola las partes sueltas, ensambla bien los cajones, rellena los agujeros de la madera, etc. Cuando hayas terminado ya tienes la cómoda lista para empezar.
Materiales que necesitas
Antes de ponerte manos a la obra tendrás que reunir los materiales que necesitarás: pintura acrílica de color gris, papel pintado a tu gusto, cola blanca de carpintero (o Modge Podge o Alkil), barniz incoloro mate, tacos de lija, trapos de algodón, rodillo de espuma, brocha de espuma, brocha mediana, tarjeta de plástico, tijeras, cúter, cinta adhesiva, etc.
PASO 1. Una vez hayas reparado cualquier posible desperfecto que tenga la cómoda de madera, puedes empezar con la transformación. Comienza por lijar toda la superficie de la cómoda para eliminar la suciedad y el barniz que pueda tener, y para conseguir que la pintura se adhiera perfectamente.
Cuando termines de darle a la lija, tendrás que eliminar muy bien el polvo resultante. Hazlo con un trapo mojado y escurrido o, incluso, con un aspirador. Lo importante es que no quede ni una mota de polvo que pueda estropear la pintura.
Una buena mano de pintura… o dos
PASO 2. Llegó el momento de empuñar la brocha. Para empezar pinta las zonas más difíciles y con más recovecos con una brocha mediana. Pinta todas las zonas a las que no puedas llegar con el rodillo de espuma. El rodillo te servirá para pintar todas las superficies lisas, como los laterales de la cómoda o el frente de los cajones.
Un consejo general que te servirá a la hora de pintar muebles: es importante escurrir bien la brocha y estirar la pintura. Así evitamos pegotes y churretones.
Tendrás que dar dos capas de pintura gris, dejando secar totalmente entre una y otra capa.
La magia del papel pintado
PASO 3. Cuando la segunda capa de pintura esté seca ya puedes colocar el papel pintado. En este caso se ha decorado el frente de los cajones con un bonito papel de zorros.
Saca los cajones de la cómoda de madera, mide y recorta las piezas de papel necesarias y tenlas a mano junto con la cola blanca (o Modge Podge, un producto similar al Alkil).
PASO 4. Aplica la cola con una brocha de espuma, de forma que quede uniforme, y pega el papel con cuidado. Ha de quedar bien alineado. Después estíralo con ayuda de una tarjeta de plástico para eliminar burbujas de aire y arrugas del papel.
Ve forrando el frente de todos los cajones y, si quieres, también algunas otras zonas de los laterales de la cómoda de madera. Recorta con el cúter cualquier sobrante de papel pintado.
El acabado final
PASO 5. Ya solo queda aplicar un barniz a la cómoda de madera para protegerla del uso. Aplica tres capas de barniz incoloro y mate, dejando secar el tiempo suficiente entre ellas.
PASO 6. Atornilla los nuevos tiradores, las bocallaves y cualquier otro detalle ornamental que lleve la cómoda.
El resultado es, sencillamente, espectacular. Después de este cambio radical, la cómoda de madera que teníamos al principio no se intuye por ningún lado en este mueble sofisticado y original.
DIY y fotos: Spoonflower.