¿Tu cocina necesita un buen lavado de cara? ¿Está anticuada y pasada de moda? Si la respuesta a estas dos preguntas es sí, sigue leyendo. Haciendo un solo cambio conseguirás darle al espacio un aspecto totalmente diferente. Hoy te contamos cómo puedes renovar la cocina cambiando la encimera.
La cocina es uno de los espacios de la casa que más se usa. Aunque tu cocina no sea muy grande y solo la uses para cocinar, ya lleva mucho trote diario. Y no te digo si además tienes un pequeño rincón de comedor con una mesa y sillas o taburetes. Sin embargo, hay una idea genial para solucionar el problema: renovar la cocina cambiando la encimera.
El caso es que aunque ya tenga unos años y estés deseando cambiar los muebles, el suelo o incluso el alicatado de las paredes, renovar la cocina es una obra de gran envergadura, con todo lo que ello implica. No solo supone meterse en reformas importantes, sino que para hacerlo necesitas un presupuesto considerable.
Pues bien, hoy te traemos una sugerencia interesante que te permitirá cambiar el aspecto de tu cocina sin tener que meterte en grandes obras y sin gastarte un dineral. Se trata de sustituir la encimera vieja por una nueva.
Existen muchos tipos de encimera y seguro que encuentras un modelo que va de maravilla con tus muebles de cocina. Tienes muchos materiales, en función del presupuesto que tengas disponible para invertir. Y como además puedes cambiar la encimera tú mismo, puesto que no es un trabajo difícil, te puedes ahorrar un dinero.
Elige un buen diseño para renovar la cocina cambiando la encimera
Son tantos los tipos que existen en el mercado, atendiendo al material del que están fabricadas, que elegir la encimera se convierte en una tarea compleja, aunque seguro que puedes encontrar una adecuada a tus necesidades y a la cantidad de dinero que puedes gastarte.
Si no tienes un gran presupuesto puedes optar por una encimera laminada. Estas son las que se componen de un tablero de fibras prensadas que va revestido de una lámina plástica. Su diseño es muy variado, ya que existen un sinfín de modelos que imitan a otros materiales como la madera, el granito, el cuarzo compacto, etc.
Una ventaja es que este tipo de encimeras ya se comercializan con los cantos redondeados y recubiertos con el mismo material que la superficie de la encimera.
Otros materiales que puedes elegir son la madera (muy decorativas aunque más delicadas), el granito o el mármol (son las más resistentes), el acero inoxidable (muy higiénicas, aportan un estilo industrial a la cocina), el cuarzo compacto (formado por cuarzo y otras resinas sintéticas), etc. Todo depende de tus gustos, del uso que le vayas a dar y del presupuesto que quieras dedicar a la encimera.
Cómo cambiar la encimera tú mismo
Lo primero que tienes que hacer si te decides a sustituir tú mismo la vieja encimera por una nueva, es encargar una de la medida adecuada. Cuando ya la tengas, tendrás que desmontar la encimera vieja.
Comienza por cerrar la llave de paso del agua para poder desmontar el fregadero. Tienes que desenroscar los latiguillos del agua fría y caliente, y desmontar el sifón de la válvula del fregadero. También tienes que retirar la placa de cocina, que puede que esté sujeta con grapas y con silicona.
El siguiente paso es retirar los embellecedores de la encimera, así como las piezas de unión. Ahora ya puedes quitar la encimera, desatornillándola de los muebles de cocina (seguro que está sujeta a ellos con varios tornillos).
Mide y corta tu nueva encimera
Una vez retirada la vieja encimera, llega el momento de cortar a la medida la nueva. Puedes hacerlo fácilmente si eliges un modelo laminado para renovar la cocina cambiando la encimera. Mide el fondo de los muebles de la cocina y deja unos 3 cm más para que la encimera sobresalga un poco. Traza una línea en la encimera nueva y corta por ella con ayuda de una sierra circular. Para hacerlo no te olvides de protegerte con guantes y gafas y de trabajar en un lugar ventilado (ten en cuenta que el tablero soltará polvillo cuando lo cortes).
Ahora tienes que tomar las medidas de los agujeros para el fregadero y la placa de cocina y trasladarlas a la nueva encimera. Marca, comprueba que las medidas son correctas y haz los agujeros con la sierra de calar. Antes tendrás que hacer cuatro agujeros en las cuatro esquinas para poder meter la caladora. Utiliza un taladro y una broca de madera.
Instala la encimera y vuelve a colocar el fregadero y la placa
Una vez cortado el tablero que va a ser tu nueva encimera, colócalo sobre los muebles y sujétalo por debajo de ellos con tornillos de unos 3 cm de longitud (antes comprueba que no traspasan el grosor de la encimera).
Vuelve a instalar el fregadero y la placa de cocina como estaban, sujetándolos de nuevo con silicona y grapas, y conectando los latiguillos y el sifón de la pila. Termina colocando nuevos embellecedores y remates para la encimera, así como los cantos laterales.
Ya sabes cómo renovar la cocina cambiando la encimera. Una forma sencilla de darle un aire nuevo y renovado. ¿A que ha sido fácil?