Una bañera amplia y espaciosa es una de las joyas que merece la pena esconder en el cuarto de baño. Todos querríamos tener una y no es extraño, ya que es el elemento perfecto para relajarse después de una dura jornada laboral. Una fuente inagotable de relax que, además, es capaz de decorar por sí misma cualquier espacio. Te contamos todo lo que has de saber para elegir la bañera y acertar de pleno.
Redonda, rectangular u ovalada. Lista para encastrar o para poner exenta, dándole todo el protagonismo que se merece. O con hidromasaje incorporado. Sea como sea tu favorita, es necesario saber qué aspectos debes tener en cuenta para elegir la bañera con éxito.
Y es que algo que parece tan sencillo en teoría, en la práctica resulta bastante más complicado. Son tantos los modelos, las formas y los materiales que elegir la bañera puede acarrearnos más de un quebradero de cabeza. Aquí tienes todas las claves para triunfar con la elección.
Elegir la bañera: forma y tamaño
Sí, ya sé que te gustaría tener un cuarto de baño más espacioso, en el que poder instalar una gran bañera tan grande como una mini-piscina. Sin embargo, el espacio es el que es. Y aunque hay maneras de lograr que una habitación parezca más grande, al final los metros cuadrados son los que mandan.
Por eso el tamaño de tu bañera estará determinado por lo grande o lo pequeño que sea tu cuarto de baño. Y también su forma, ya que elegir la bañera rectangular u ovalada dependerá de todos los elementos que tengas que incluir en el baño, y de cómo los distribuyas en el espacio disponible.
Las bañeras rectangulares son las más comunes. En especial si se trata de modelos que van encastrados, provistos de faldón. Aunque si tu cuarto de baño es amplio puedes colocar una bañera ovalada (son muy decorativas).
¿Qué tienes una esquina libre? Opta por un modelo semicircular. Sea como sea tu bañera, seguro que se convierte en la pieza más valiosa del baño si la usas bien. Con un poco de música tranquila, una iluminación suave y unas sales de baño, el relax está asegurado.
¿Te apetece una bañera exenta?
Son, sin duda, las bañeras más decorativas de todas. O a mí me lo parecen. Claro, que también ocupan bastante, por lo que solo son adecuadas para cuartos de baño de tamaño XXL. Sin embargo, ¿a quién no le gustaría poder sumergirse cada noche en una de esas bañeras de patas de aire clásico? ¿Puede haber una forma más elegante de tomar un baño? No lo creo.
Las antiguas bañeras de patas se fabricaban en hierro fundido y se esmaltaban de forma artesanal. Aunque ya no se realizan de esta manera, sí puedes encontrar en el mercado modelos actuales que imitan las viejas bañeras de patas.
Y si tu espíritu decorador es más moderno y contemporáneo, también existen bañeras exentas de diseño que te van a encantar. Modelos sencillos y muy elegantes que se convierten en el centro de todas las miradas.
Pues bien, existe una solución genial para poder disfrutar de una bañera exenta, de dimensiones imponentes, aunque tu cuarto de baño tenga un tamaño estándar. Puedes instalarla en el dormitorio, si tienes en él espacio suficiente. ¿Te gusta la idea?
Muchas veces las habitaciones cuentan con esos metros que le faltan al baño, por lo que poner allí la bañera exenta puede ser una gran idea. Así encontrarás un espacio de intimidad en el que relajarte con un buen baño siempre que quieras y lo necesites.
Soluciones sencillas o más complejas
Aunque un buen baño relajante es en sí mismo todo un placer, si quieres alcanzar la excelencia a la hora de elegir la bañera lo mejor es que te decidas por un modelo con hidromasaje incorporado.
Solo tendrás que bucear un poco en el universo de las bañeras equipadas con sistemas de hidromasaje para darte cuenta de lo amplia y variada que puede ser la oferta. Lo mejor es que no te compliques y optes por un modelo sencillo. Elige uno con chorros de agua e inyectores de aire que te garanticen un masaje realmente relajante y reparador.
Y, por supuesto, optar por marcas de calidad puede ser una buena garantía a la hora de elegir la bañera con hidromasaje más adecuada para tus necesidades.
Disfrútala a diario
Ya tienes tu bañera instalada. Ahora, solo tienes que reservar un tiempo para ti, en el que disfrutar de un baño tranquilo. Puede que por las mañanas no tengas mucho tiempo y sea más fácil darte una ducha rápida. Sin embargo, tomar un baño por la noche te servirá para sacudirte de encima toda la tensión y el cansancio de la jornada.
Habrás encontrado la forma perfecta de decirle adiós al estrés diario. ¿Te apetece?
