Pintar las paredes de nuestra casa es una tarea que todos tenemos que acometer más tarde o más temprano. Puede que prefieras encargar el trabajo a un profesional. Pero si decides hacerlo tú mismo tendrás que tener en cuenta un larga lista de aspectos. Uno de ellos será el tipo de pintura que necesitas para tus paredes. Hoy te contamos cuáles son los más adecuados en cada caso.
De entre la lista de trabajos de bricolaje que comprenden el mantenimiento de una casa, renovar las paredes es una de las más sencillas. Al menos, es uno de los trabajos que puedes hacer tú mismo con resultados aceptables en la mayoría de los casos. Elegir adecuadamente el tipo de pintura que necesitas será uno de los factores que influyen en el éxito de la aventura.
La información es poder, en tantos y tantos aspectos. Y también en cuestiones bricolajeras como la de pintar las paredes de tu casa. Por eso, mi primera recomendación es que, si decides hacer el trabajo tú mismo, busques toda la información que puedas necesitar. Desde la forma de preparar la habitación, la técnica correcta que tendrás que seguir, o el tipo de pintura más adecuado en tu caso.
Hoy queremos hacer un repaso por las diferentes clases de pinturas que existen para las paredes. Veremos cuáles son más resistentes, lavables o adecuadas para un espacio determinado. Así podrás elegir con conocimiento de causa.
¿Sabes cuál es el tipo de pintura que necesitas?
A la hora de pintar las paredes de casa, un consejo útil es que inviertas en un producto de calidad. Ya que vas a realizar tú mismo el trabajo y te vas a ahorrar unos buenos euros al hacerlo, elige una buena pintura aunque sea un poco más cara. El resultado será mucho mejor y las paredes estarán más tiempo en perfectas condiciones.
Partimos de la base de que quieres utilizar pintura plástica, ya que la opción del temple ha quedado prácticamente en desuso. Con las plásticas, al ser lavables, consigues un mantenimiento mucho mejor. También hay otras opciones, como los esmaltes acrílicos (al agua) de los que hablaremos después.
En cualquier caso conviene elegir pinturas de alta lavabilidad, que puedan limpiarse con un paño húmedo sin deteriorarse. Esto es especialmente importante si tienes niños pequeños en casa. ¿Es tu caso? Pues entonces no hace falta que te diga lo que pueden llegar a ensuciar con sus manitas…
Duraderas y resistentes
Uno de los productos que han demostrado ser más resistentes, a la hora de elegir el tipo de pintura para las paredes, es el esmalte acrílico. Se emplea para diferentes superficies y objetos, pero es adecuado también para las paredes ya que puede aplicarse sobre yeso sin problema.
Al ser acrílico seca bastante rápido y no huele por lo que puede utilizarse en interiores. Y si es verdad que es más resistente que la pintura plástica, también lo es que resulta más caro.
En cualquier caso, existen productos muy resistentes capaces de repeler las manchas, gracias a un componente especial que incluyen. También soportan los roces e, incluso, muchos productos de limpieza. Son una gran alternativa para espacios conflictivos como los cuartos de los niños, cocinas y zona de mucho uso.
Lo último en pinturas para la casa
En lo que se refiere al tipo de pintura que podemos elegir para decorar nuestras paredes, la cosa ha avanzado muchísimo. En la actualidad existen productos muy específicos, para cubrir un sinfín de necesidades. Como la pintura anti-imperfecciones que es perfecta para disimular cualquier irregularidad en la aplicación, las marcas del rodillo, etc. Muy adecuada si vas a realizar el trabajo tú mismo y no tienes mucha experiencia en la tarea.
Otro tipo de pintura bastante novedosa es la fotocatalítica, capaz de limpiar el aire de partículas tóxicas. Increíble, ¿no crees? Se puede aplicar sobre cualquier superficie y elimina olores, virus, bacterias, microorganismos, etc. Para usar en espacios en los que viven personas con determinados tipos de alergias.
Además, hoy puedes pintar tus paredes con productos que te aportan muchas alternativas a la hora de decorar: pintura magnética para imantar la pared, de pizarra, de la que se ilumina por la noche, etc.
Para zonas húmedas
En espacios concretos con un alto grado de humedad, como pueden ser la cocina y el cuarto de baño, lo mejor es usar productos anticondensación. Este tipo de pintura reduce el vapor que se forma en estos espacios y soporta mucho mejor la humedad del ambiente.
Además, resisten el moho y los hongos, por lo que te durará mucho más tiempo en buenas condiciones. Además, son fáciles de limpiar (basta con pasar un trapo húmedo), lo que es una ventaja a tener en cuenta.
Como ves, tienes un amplio repertorio de productos para elegir, en lo que se refiere al tipo de pintura. Para que puedas decidirte por la que más te conviene. ¡Manos a la obra!