¿Te apasiona el estilo nórdico en decoración? Si la respuesta a esta pregunta es sí, te conviene seguir leyendo porque vamos a contarte el secreto para lograr un nórdico acogedor en casa. Aquí tienes todas las claves.
He de reconocer que, a pesar de que las corrientes escandinavas en decoración me gustan, en ocasiones me parecen algo frías y desangeladas. Los ambientes demasiado blancos, las superficies lisas y minimalistas… A veces echo en falta un nórdico acogedor, más cálido y un poco más subido de tono.
Si a ti te pasa lo mismo, igual es que estamos confundiendo los conceptos. Hoy queremos contarte que el estilo nórdico no es frío ni minimalista en exceso. Aquí tienes algunos tips para conseguir ambientes de lo más acogedores en tu casa nórdica.
El nórdico acogedor
Seguro que, si te interesa la decoración y el interiorismo y eres amante de las tendencias nórdicas, habrás oído hablar de ambientes o casas hygge. Es una palabra que en Dinamarca tiene un significado especial.
Para resumirlo de la mejor manera posible, diremos que su significado se centra en la esencia de un hogar acogedor, en el que sentirnos a gusto. Es la sencillez de las pequeñas cosas, la magia de los placeres cotidianos.
Pues bien, yo creo que en los ambientes hygge está el secreto de un estilo nórdico acogedor, cálido y confortable. Con ambientes sencillos, pero a los que no les falta ni un ápice de carácter y personalidad. Ese es el nórdico que a mí me gusta.
Ahora voy a contarte cuáles son, a mi modo de ver las cosas, los aspectos que hay que cuidar para tener una casa de un estilo nórdico acogedor. Puede que no sea tan puro como los gurús de la decoración se empeñan en transmitir, pero seguro que es más personal, más real y mucho más interesante.
El poder de la luz
Hemos hablado largo y tendido sobre el poder de la luz en lo que a crear ambiente se refiere. Ya sabemos todo cuál es la magia que la iluminación puede ejercer en un espacio concreto. Pues bien, para el estilo nórdico una buena iluminación es sencillamente imprescindible.
Y esto tiene una poderosa razón de ser. En los países nórdicos la luz es un bien preciado. No les sobra y por eso la tratan con mimo, de la mejor forma posible. Intentan multiplicarla y potenciarla al máximo, porque saben que la luz es sinónimo de confort, de amplitud, de bienestar.
Por eso, cuando quieras diseñar la iluminación artificial de una estancia bajo los presupuestos del estilo nórdico acogedor, procura establecer varios puntos de luz y no solamente uno. De esta manera lograrás crear un ambiente más confortable.
También debes huir de las luces blancas y demasiado frías. Apuesta, siempre que sea posible, por luces amarillas, mucho más cálidas.
Blanco todopoderoso
Si hay una característica que define los ambientes de estilo escandinavo es, sin duda, el predominio del color blanco en la paleta de colores modelo. Y es cierto que se utiliza muchísimo para las paredes, techos, suelos, muebles, etc.
Desde mi percepción del estilo nórdico, y teniendo en cuenta que estamos en un país en el que el sol es un tesoro que disfrutamos en abundancia, yo propongo introducir otros colores sin dejar de ser fiel al blanco.
Es posible utilizar el blanco puro como base de fondo y utilizar otros colores para crear contrastes de gran belleza. Atrévete con algún color oscuro, si eso te gusta. Los contrastes de color pueden quedar muy bien.
Apuesta por la naturalidad en los materiales
El reflejo de la naturaleza en los ambientes de estilo escandinavo es una constante. Una de las formas más habituales de lograrlo es introducir en el espacio plantas y flores. Pero no es la única. También puedes conseguirlo otorgando relevancia a los materiales naturales para muebles y complementos: madera, piedra, fibras vegetales, etc.
También es buena idea elegir textiles que sean lo más naturales posible, como el lino, la lana o el algodón.
Y, para crear esos contrastes de los que hablábamos antes (que diferencien un poco tu casa del resto de las casas de estilo nórdico), puedes mezclar texturas y materiales. Los fríos, como el metal y la piedra, con los cálidos, como las telas o la madera. El resultado será un nórdico acogedor como nunca lo habías visto.
Cuida los detalles
Después de revisar tu forma de entender el estilo nórdico, con las claves que te ofrecemos en este artículo, seguro que ya has puesto de manifiesto tu propia forma de decorar tu casa.
Ya solo falta una última cosa: extremar el cuidado de los detalles. Acostúmbrate a hacerlo cada día, y te saldrá de forma natural cuando tengas invitados. Se trata de colocar las cosas con atención. De cuidar la forma en que pones la mesa, en que adornas un rincón con un jarrón con flores. Si lo haces siempre, te saldrá como algo natural, y tu casa lucirá preciosa.
Estas son las claves para conseguir un estilo nórdico acogedor y confortable en casa. ¿A qué esperas para ponerlas en práctica?